¿Son los movimientos involuntarios una enfermedad?

El movimiento involuntario de algunos músculos, que se contraen y causan movimientos repetitivos o de torsión, puede deberse a una enfermedad o por una disfunción del sistema nervioso, probablemente en los ganglios basales del cerebro.

Esta enfermedad llega a afectar una parte del cuerpo (distonía focal), dos o más (distonía segmentaria) o todo el cuerpo (distonía general).

Se desconoce su causa exacta, pero se ha encontrado que en ocasiones es heredada o puede deberse a alguna alteración en la comunicación de las células nerviosas o ser un síntoma de una enfermedad o afección, como Parkinson, Wilson, Huntington o un accidente cerebrovascular.

Lee también: México, el segundo país del mundo con más niños y niñas huérfanos por el Covid

Sobre su diagnóstico, el doctor Salvador José Santamaría Molina, del Centro Médico Nacional la Raza, explica que suele ser complicado y, en ocasiones, puede interpretarse de manera errónea como estrés, rigidez de cuello o trastorno psicológico.

“Su dificultad radica en los síntomas, que son muy parecidos a los de muchas otras afecciones”.

Pero señala que algunos síntomas recurrentes son espasmos y contracciones musculares en diferentes partes del cuerpo: brazo, pierna o cuello, ocurren durante una acción exacta, como escribir a mano y la intensidad del dolor varía.

La vida de los pacientes se ve muy afectada por la recurrencia de los síntomas, con un impacto en su capacidad para socializar, dormir bien, conducir o realizar tareas diarias.

Del tratamiento, el doctor Santamaría Molina señala que “todo depende de la gravedad; la primera línea de manejo es el uso de la toxina botulínica tipo A (BoNT-A), esta neurotoxina bloquea la conexión entre el nervio y el músculo, lo que provoca una disminución de las contracciones musculares durante aproximadamente tres meses.

“También se podría considerar la cirugía cuando los pacientes ya no son receptivos a otros tratamientos, incluyendo la toxina botulínica”, afirma.

EL DATO

El blefaroespasmo es la segunda distonía focal detectada con mayor frecuencia. Esta enfermedad toma su nombre de la palabra griega blefaro que significa “párpado” y de la palabra espasmo, que denota una contracción involuntaria del músculo.

Lee también: Familia de Vicente Fernández habla de la presunta muerte cerebral del ídolo ranchero