¿La UNAM puede cancelar un título por plagio de tesis? Rector habla de caso Yasmín Esquivel

El caso de la tesis pirata de la ministra Yasmín Esquivel tuvo su efecto para que no llegara a la presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, pero también ha sacudido a la alta burocracia de la UNAM, por la que esta tarde de viernes tuvo que salir a dar la cara el rector Enrique Graue Wiechers.

Después de respaldar las conclusiones y determinaciones tomadas por las autoridades de la Facultad de Estudios Superiores de Aragón, el rector aseguró que el plagio es una conducta reprobable, una usurpación de ideas y talentos, un acto que pone en entredicho la ética y la moral de quien lo comete, y ofende a quienes se esmeran por cumplir con este requisito académico.

Sin embargo, “la UNAM no puede retirar ni anular un título”, ya que “su normatividad no lo permite”, reiteró.

“Tengo muy claro que nada de lo anterior redime la indignación que sentimos ante un caso que, como el que nos ocupa, pueda llegar a quedar impune, sólo con el descrédito profesional y social derivado de los debates que entorno a él se han suscitado”, aceptó el rector de la UNAM.

Por eso, ya convocó a la Comisión de Legislación Universitaria proponer reformas a partir del caso de Esquivel Mossa para corregir los actuales vacíos legales que imposibilitan a la UNAM a sancionar su plagio.

“La rectoría de ninguna manera evade su responsabilidad. Mi actuar no es tampoco producto de postergaciones, timidez, temor o encubrimientos. Actúo y lo seguiré haciendo en el marco de la legislación universitaria. No puedo ni debo ir más allá de lo que la normatividad nos permite”, se defendió el rector sin mencionar al presidente López Obrador, quien aseguró que la UNAM “se lavó las manos” al no sancionar el caso.

“Sé muy bien que el prestigio de esta administración y el de nuestra casa de estudios están en entredicho”, continuó el rector” pero no por eso actuaremos en forma apresurada o irresponsables a presiones externas para hacer juicios sumarios”.

El 21 de diciembre, el escritor Guillermo Sheridan publicó una comparación entre la tesis de licenciatura de la estudiante de Derecho Yasmín Esquivel Mossa, presentada en 1987 en la entonces ENEP Aragón, y la presentada un año antes por un estudiante de la Facultad de Derecho, que muestra una copia fiel de páginas, ideas y hasta errores gramaticales, por lo que se acusa de plagio a la actual ministra, quien desde el primer momento negó haber copiado su tesis.

El plagio fue certificado unos días después por las autoridades de la FES Aragón, conclusión respaldada por la rectoría de la UNAM, que difundió haber consultado al abogado de la máxima casa de estudios de México sobre las determinaciones que debería tomar la autoridad universitaria ante el caso. Sin embargo, ante el vacío legal en su normativa, enviaron el expediente a la SEP para la correspondiente sanción.

Esta salida fue calificada por el presidente López Obrador como una “lavada de manos”, y fue tomada por buena parte de la opinión pública como una visión legalista para no hacerse cargo por el plagio de su entonces estudiante.