En este pueblo de Edomex ya hasta saben a qué hora pasan los asaltantes y quiénes son

Estado de México. En la zona donde se ubica el ducto de Pemex, en San Cristóbal Huichochitlán del municipio de Toluca, se combatió el problema de huachicoleo; sin embargo, se dispararon los asaltos, sobre todo contra mujeres.

Los lugareños señalaron que en tan sólo un mes se registraron por lo menos diez casos, principalmente entre las calles Francisco Javier Mina y Moctezuma en Ejidos de Calixtlahuaca y el Barrio de Santa Cruz, considerados por los lugareños como un foco rojo, por la falta de alumbrado público, las milpas y la ausencia de la policía municipal.

Observaron que los atracos casi siempre ocurren entre las 4:00 y 7:00 de mañana y de las 18:00 a las 20:00 horas, que es cuando las personas se van a trabajar a las fábricas de la región o regresan a casa.

Los lugareños han identificado a dos bandas de delincuentes, una de ellas conformada por tres hombres y una mujer que se mueven en motocicleta, la otra son varones que andan en bicicletas.

Recordaron que entre las víctimas se encuentra Viridiana, una mujer de 29 años que hace una semana murió, luego de que fue golpeada para quitarle una motoneta, cuando se dirigía al trabajo acompañada de otras dos mujeres.

Algunos vecinos señalaron que falleció de un infarto, otros de un balazo. Otra mujer fue brutalmente golpeada cuando regresaba del trabajo, por lo que presentó una denuncia ante el ministerio público.

“Queremos que nos den seguridad, sobre todo a uno como mujer, siempre nos tocan los asaltos o las manoseadas, salimos con miedo a la calle”, expresó Alejandra, una vecina.

“Todo empeoró desde que estaba lo del huachicoleo, asaltos siempre ha habido, pero eran escasos y ahora se ha oído más seguido”, comentó Daniel Gutiérrez, otro lugareño.

Los vecinos pidieron al gobierno de Juan Rodolfo Sánchez Gómez voltear hacia la zona norte del municipio, ya que constantemente se encuentran cuerpos sin vida y abandonados.

“Incluso, nos han venido a tirar a personas desnudas, yo les he prestado ropa”, señaló Francisco Sánchez, lugareño. Por ello, solicitaron seguridad y patrullajes permanentes, sobre todo, en la hora de entrada y salida del trabajo.