En 18 municipios
Delincuencia organizada cobra de 100 mil a 500 mil pesos por derecho de piso, en Morelos
Pese a que ya se había confirmado su asistencia, el gobernador y su gabinete no acudieron a la manifestación debido que presuntamente recibieron amenazas
Foto: Archivo El Gráfico
CUERNAVACA.– Fastidiados de la ola de violencia e inseguridad que azota al estado de Morelos, por quinto año consecutivo, miles de personas salieron a las calles para marchar a favor de la paz y la tranquilidad social.
Ahí, el obispo Ramón Castro Castro mencionó que son 18 los municipios los que se paga derecho de piso a los delincuentes y aseguró que las cantidades que cobran van de los 100 mil a 500 mil pesos.
“Muchos de ellos porque hicieron un acuerdo y les pagaron su campaña, muchos porque los obligan. Si las mismas autoridades pagan a las bandas criminales y no denuncian porque ellos están amenazados o su familia, que puede hacer aquella señora que vende tlacoyos en Cuautla, o quienes venden acorazados en Cuernavaca y también les cobran, existe un miedo que paraliza y se acrecienta cuando la misma policía municipal y estatal está involucrada”, señaló.
El representante de la iglesia católica en Morelos hizo un llamado a los grupos criminales que operan en la entidad para que reflexionen sobre la violencia que han provocado en los últimos años y de alguna manera den una tregua que permita recobrar la paz a los morelenses.
La marcha inició a las 10 de la mañana y fue encabezada por el obispo, quien convocó a miles de feligreses quienes partieron de la iglesia de Tlaltenango.
Portando algunas pancartas con leyendas como “En Morelos No Hay Paz”, vestidos de blanco, y con flores y globos en las manos, los asistentes recorrieron la avenida Tlaltenango y llegaron hasta la Pradera, en donde continuaron sumándose más personas.
En varios puntos, el líder católico estatal se detuvo para orar en favor del término de la violencia en el estado y por todas aquellas personas que han sido víctimas de la delincuencia.
La caminata continuó hasta pasar por el Centro de Cuernavaca y, al llegar a la catedral, de nueva cuenta se ofició una misa.
Como ya se había informado, pese a que ya se había confirmado su asistencia, el gobernador Cuauhtémoc Blanco y su gabinete no acudieron a la manifestación debido que presuntamente recibieron amenazas por parte de la delincuencia organizada.
