PAGAN MORDIDAS DE HASTA 2 MIL PESOS
Comerciantes mexiquenses sufren extorsiones para vender productos en la Central de Abasto
El presidente de la Mesa Directiva de la Central de Abasto, Jorge Palma, denunció que diariamente, decenas de personas son víctimas de estos filtros de revisión, por parte de elementos de tránsito
(Foto: Michelle García, El Gráfico)
TOLUCA.— Ante los operativos de Verificación Vehicular en Toluca, comerciantes, productores y artesanos de otros municipios que llegan a ofertar sus productos a mercados y a la Central de Abasto han sido víctimas de extorsión, pues ante el temor de que su inversión caduque, se rompa o sea retenida, acceden a pagar “mordidas” a los elementos de tránsito.
El presidente de la Mesa Directiva de la Central de Abasto, Jorge Palma, denunció que diariamente, decenas de personas son víctimas de estos filtros de revisión.
“Ninguno de ellos (los comerciantes) están dispuestos a perder su mercancía y es evidente que son extorsionados. Es ahí donde falla el objetivo de los operativos”, dijo.
Y aunque en un principio, estos filtros redujeron el número de visitantes a la Central, actualmente la extorsión ha ido en aumento, en vialidades como López Portillo, Alfredo del Mazo y Matlazincas.
“De nueva cuenta, el comercio; los productores, a quienes les cuesta más ganarse la vida, son los más afectados. Aquí llegan y cuentan muchas historias de extorsión”, relató Palma.
FUERA REGLA
Y aunque la mayoría de los comerciantes reconocen que para evitar estas situaciones deben tener sus vehículos en regla, algunos modelos, aseguran que ya no pasarían el trámite e invertir en un vehículo nuevo no está dentro de las posibilidades económicas de los comerciantes.
“La semana pasada estábamos entrado por Alfredo del Mazo y estaban revisando a un chatarrero frente de nosotros, como no tenía verificación pagó una mordida. Nosotros traemos flor de cempasúchil, nube y terciopelo; por el arrastre iban a ser 2 mil 300 pesos y la multa era de mil 700, al final me sacaron 2 mil y pues ya pude llegar a dejar la flor. Ya me salí atravesado todas estas comunidades hasta Palmillas”, aceptó Mario Becerril, originario de Aculco.
Por otra parte, acusaron que desde septiembre hasta diciembre la incidencia delictiva va en aumento, lo que también agobia a los productores.
