Autoridades impulsan venta de maíz pero no cumplen objetivos, en el Estado de México

Por Claudia González

El Estado de México es el tercer productor de maíz a nivel nacional; en 2017 produjo 2 millones 200 mil toneladas y para esta temporada se estima rebasar la cifra, de acuerdo con la Secretaría de Desarrollo Agropecuario (Sedagro). 

Durante el ciclo agrícola primavera-verano 2018 fueron sembradas 494 mil hectáreas de maíz, de las cuales 19 mil son forrajero, el resto es para producción de grano y elotes, informó Francisco Rivero, director general de Agricultura por suplencia. 

PÉRDIDAS

Aunque autoridades estatales refieren la existencia de programas para apoyar la venta de estos productos, incluso esquemas de asesoría y ayuda para quienes no migran a otro tipo de opciones de comercialización, para los trabajadores del campo, las condiciones no son buenas. 

Es el ejemplo de Juan, un peón que trabaja en parcelas de La Comunidad, en Temoaya. Mientras acomoda maíz cacahuacintle en costales al pie de la carretera para después subirlos a un camión de redilas que los transportará a la Ciudad de México para su venta, dice que para él y otros jornaleros, los ingresos no resuelven sus necesidades. 

La siembra de este grano para los pequeños productores no genera grandes dividendos, son los intermediarios quienes obtienen más ganancias por un trabajo que implica la mayor parte del año. 

Aunque las parcelas en el Valle Toluca-Atlacomulco se observan verdes, repletas de milpas y a la orilla de la carretera ofrecen maíz cacahuacintle (de granos grandes) en 70 pesos, los responsables de la siembra dicen en que el dinero no es para ellos.