Abuelita de 91 años vive con grietas desde el sismo de 1985

Por Miroslava Callejas

“Tengo grietas desde el sismo del 85”, platica María Aguilar Alcántara, de 91 años, desde su casa en la calle Campaña de Ébano, en la que vive desde hace 40 años.

En varias partes de la vivienda se pueden observar las cuarteaduras que han dejado los sismos de 1985 y de 2017. “Sólo vino un arquitecto a revisar y dijo que estaba bien, los de Protección Civil ni se aparecieron” comenta Alfonso, su sobrino. 

“Ahí se ven las grietas, pero mientras no se caiga, estamos bien. Yo sólo vivo de mi pensión y no he podido arreglar la casa porque siempre hemos sido pobres, además me enfermé y ya no puedo caminar muy bien” dice doña Mari.

Al ser cuestionada si dejaría la casa, su respuesta fue negativa: “Ya a estas alturas uno ya no puede estar en otro lado, mis sobrinos me dicen que me vaya con ellos, pero uno ya no se halla; yo no les exijo tanto a los autoridades, sino que donde ellos vean las facilidades de resanar lo hagan mientras no me muera apachurrada y pues si me toca, ya ni modo”, cierra con una carcajada.