Circe ganó una guerra que no era suya, pero entre morenistas las batallas continúan y ella, dicen, quedará en medio de las traiciones que se vienen.
CASO SIMILAR: Algo parecido paso en Gustavo A. Madero, solo que ahí César Arnulfo Cravioto no apareció tan sonriente, pese a que ya le dieron la candidatura para contender como diputado.
Él soñaba con la alcaldía y luego del jaloneo que se armó, pensó que tenía serias posibilidades, pero la sorpresa fue que a quien le entregarán la estafeta fue a Janecarlo Lozano, quien llegó al Congreso de la Ciudad de México como perredista, pero se pasó a Morena por así convenir a sus intereses, mismos que ayer quedaron claros; si algo tuvo fue visión. Janecarlo es otro que quedará atrapado entre los rencores ajenos, pero frente a un personaje más oscuro que ha demostrado que no le gusta que le quiten el poder.
RASPADO: En el Estado de México también andan duros los jaloneos y todo indica que con la designación, ayer, de Fernando Vilchis como candidato a diputado federal, se agotan las posibilidades de que su esposa, Esmeralda Vallejo, lo pueda suceder en el cargo, como lo habían planeado en el seno familiar.
¿Se quedará conforme con lo que le dieron?