En todo el lugar se ven muchos deportistas que contrastan con familias enteras que buscan sembrar una semilla en sus hijos. También se observa el paso de los ciclistas que, con bufandas y dos capas de ropa, se disponen a pedalear el circuito del Bosque de Chapultepec.
Están también los que salen a correr o caminan con sus animales y conforme se acerca el frío, los estantes que venden jugos u ropa deportiva se adaptan la temporada. “Ya tenemos gorros y buff, es de lo que más se vende en estas fechas”, dice Jacinto, el vendedor.