Niños rescatados de Tailandia hablan sobre su rescate

CHIANG RAI.— El equipo de fútbol ‘Los jabalíes salvajes’ y su entrenador, ofrecieron ayer su primera conferencia de prensa tras ser rescatados de la cueva en la que estuvieron atrapados más de dos semanas; dieron muestras de estar en buen estado, se rieron y hasta cascarearon.

Los chicos llegaron con las camisetas de su equipo. Estuvieron junto a algunos de los doctores que los atendieron, y parte del equipo que los salvó, para platicar cómo vivieron sus días en la cueva y su posterior rescate.

LA ESTADÍA. El entrenador, Ekapol Chantawong, de 25 años, fue el que respondió las preguntas a la prensa. Explicó que el grupo se había puesto de acuerdo para entrar a la gruta, donde varios de los niños ya habían entrado. 

No llevaban comida y, contrariamente a lo que se sabía, todos sabían nadar. "Pensamos estar en la cueva durante una hora, pero nos dimos cuenta de que estábamos atrapados cuando quisimos salir. No fuimos conscientes de lo rápido que podía subir el agua", relató.

En ese momento, retrocedieron y se quedaron en la cámara donde fueron hallados. El grupo se iba turnando para cavar un hueco en busca de una salida. "Vimos que el agua goteaba de las paredes, así que nos quedamos cerca de esa fuente. El agua estaba limpia", contó el entrenador. Al paso de los días, el hambre y la oscuridad fueron fatigando al grupo.

"De repente oímos a gente hablando", explicó Adul Sam-On, de 14 años, el único de los niños que sabía algo de inglés. "Bajé con la linterna y hablé con el buzo, aunque tuve que pensar mucho para contestar a las preguntas. Mi cerebro no funcionaba muy bien", admitió. "Fue como un milagro", dijo.