¡Cámbiame el puerco, digo, el cuerpo!

Todas hemos tenido en algún punto de nuestra vida un enojo por alguna parte de nuestro cuerpo. Hacemos berrinche porque queremos una nariz más pequeña, soñamos con unas pompas más grandes, sumimos la panza para que se nos vea cintura, o simplemente queremos vernos “bien mamis” pero, ¿sabías que no eres la única sufriendo por el cuerpo perfecto?

Las calles de la Ciudad de México están llenas de mujeres que como tú, le ponen una vela a San Güichito el santo más comelón para que no les de hambre, o que usan ropa flojita porque sienten que así no se les ven los muslos. Y como hay tantas que compartimos el disgusto, me emprendí a buscarlas y a preguntarles qué les gustaría cambiar de su cuerpo.

De 10 mujeres a las que les pregunté qué parte del cuerpo se cambiarían, cuatro dijeron que les gustaría cambiarse la cintura, seguida por las pompas, luego muslos, y finalmente cara. Además, sorprendentemente J-Lo y Shakira son las modelos a seguir del cuerpo que les gustaría tener a las mexicanas. ¡Nada de Ninel Conde, aquí pura clase!

¡Aceptémoslo! Sabemos que el león no es como lo pintan, y un montón de las mujeres que vemos en televisión y en revistas han pasado por cuchillo, así que pa' que no pases por eso y  no te corten el puerquecito, digo el cuerpecito (y te ahorres una buena lana) aquí te van los 3 tips para sacarle el provecho a tu cuerpo y llevarlo hasta a la perfección:

1.- Panza llena corazón contento: Piénsalo bien, si tu cerebro dice gym, pero tu corazón te dice “4 de pastor con todo” entonces hazle caso al cerebro. Cambiar los hábitos alimenticios son una de las principales formas de mejorar nuestro cuerpo. No sólo bajas de peso, también mejora tu piel y tú cabello.

2.- Mango petacón: Si tienes tanta pompa que te dicen la langosta porque toda la carne está en la colita, ó si no tienes nada y te conocen como la pocas pompas, ¡Ejercicio comadre, ejercicio! Cambiar tus hábitos deportivos no sólo te harán tener las pompas, muslos y abdomen soñados, sino que mejorará tu calidad de vida considerablemente.

3.    3.- Para qué tanto brinco estando el suelo tan parejo: Muchas veces nuestro cuerpo está completamente perfecto y no lo vemos así. Somos complicadas porque nunca estamos conformes. Si eres muy alta te gustaría ser baja, y si eres muy baja quieres ser alta. ¡Acéptate como eres!. A veces el mejor cambio no es cambiarte algo del cuerpo, si no cambiar la forma en que te miras.