Los niños deben alegrarse del regreso al colegio, es cierto que para algunos puede ser un dolor de cabeza, tanto que el Centro de Estudios Psicológicos en la Infancia (CEEPI) detectó que algunos viven la vuelta a la escuela con angustia.
Esto porque, señalan sus expertos, de los que acuden a su clínica padecen ansiedad, insomnio o depresión.
Alerta general. Los problemas reales deben atenderse cuando los niños padecen los síntomas de manera aguda y persistente o durante más de 15 días después del regreso a clases:
Entonces, “es indispensable poner atención porque detrás del miedo de ir a la escuela, puede haber un problema más serio”, explica la doctora Claudia Sotelo Arias, directora de CEEPI.
El foco del problema:
Bullying. Si ha existido acoso escolar constante o si el niño no se siente integrado socialmente al colegio: 50 por ciento de los casos.
El ciberbullying es un tipo de acoso o intimidación que se da en medios socio-digitales, por ejemplo redes sociales como facebook, por mail, por chats, por mensajes de texto, publicaciones digitales como videos o blogs.
Sobreprotección. Niños que no son autónomos y cuando deben ir a la escuela hacen berrinches, se tornan ingobernables, porque existe un miedo irracional a la separación de sus padres.
Problemas de aprendizaje. Los niños no logran desarrollar sus habilidades cognitivas, sociales o emocionales. Sienten frustración, depresión y verán minada su autoestima.
Atención, mucha atención. En cualquier caso es fundamental tomar medidas inmediatas como detectar los escenarios y motivos del acoso escolar, implementar medidas para atenuar la separación con los padres y determinar el origen del bajo rendimiento escolar.
“En CEEPI estamos especializados en atender estas problemáticas… Aplicamos pruebas que determinan la capacidad intelectual, el grado de inmadurez o los problemas emocionales y tenemos talleres para crear nuevos hábitos de estudio en los niños”, señala Sotelo Arias.
Observa el comportamiento de los menores al volver a la escuela.
