La ropa de mezclilla, sobre todo los jeans, es de las más usadas en el planeta, es de las preferidas para la etapa escolar. Se fabrica con algodón que la hace cómoda y fresca.
Sobre los jeans hay que decir que han evolucionado y Ana Karina Ortiz, directora de mercadotecnia, publicidad y licencing de Silver Plate, cuenta:
La mezclilla o denim es un tejido empleado inicialmente en la confección de ropa de trabajo y aun cuando hay precisión sobre su origen se cree que surgió en Europa en la Edad Media y en la ciudad francesa de Nimes.
No siempre fueron jeans. Los campesinos de la zona llevaban chalecos, pantalones y otras prendas confeccionadas con la “tela de Nimes”, que derivó en denim. Debido a su resistencia, se empleaba para las velas de los barcos. Así comenzó a viajar, y Ortiz dice que con la navegación se realizaron intercambios textiles desde el siglo I D.c. en la ‘ruta de la seda’.
Así es que, en el diseño, corte y confección de unos jeans, los viajes siguen, la mezclilla pasa por varios países, como China, India, Turquía, Pakistán, Bangladesh, Japón y México.
Sobre su color clásico cuenta que el índigo surge cuando un comerciante estadounidense conoce las técnicas de teñido utilizadas por comerciantes de Génova con un pigmento azul menos caro y más abundante procedente de la India.
Más que velas… Para confeccionar unos jeans se necesitan 120 metros de hilo y su calidad dependerá de su grosor. Hay hilo de diferentes calibres como 105 u 80.
Desde que fueron inventadas durante la Revolución Industrial en Inglaterra, las máquinas de coser han sustituido gran parte del trabajo de costura manual, produciendo mayores cantidades en menos tiempo.
“Con una máquina podemos realizar una gran variedad de puntadas y patronaje. Existen más de 30 tipos diferentes de puntadas”, explica la experta en jeans de Silver Plate.
