Para comer bien, sabroso y al natural

La imagen, lemas o “promesa milagro” de un producto suelen encantar a los consumidores, que los compran sin más, es decir sin revisar las etiqueta y tabla nutrimental, que son como las letras chiquitas de los contratos y pólizas de seguros.

Los expertos de Placeres Orgánicos tienen algunos consejos para personas que buscan un estilo de vida saludable e integral:

• Consume alimentos naturales. Olvida embutidos y la comida del súper que contiene ingredientes que no reconoces. Opta por incluir ingredientes locales, naturales y de preferencia orgánicos. Busca en mercados, tiendas especializadas. Notarás una gran diferencia en el sabor.

• Prefiere alimentos sin gluten. Consumir alimentos con “trigo entero” es bueno, pero en muchas ocasiones no lo es. La mayoría son procesados en gran medida, por lo que, son escasos de nutrientes, están llenos de azúcar y están elaborados con ingredientes genéticamente modificados y a veces con pesticidas. Sustituye por tortillas de maíz y harinas vegetales como de papa o semillas. No debes abusar de ellos, consúmelos de manera moderada.

• Cambia tus antojos. Planifica tu dieta para combatir los antojos por impulso y consumir golosinas. Ya que, estas estarán cargadas de sal, aceite de maíz, harinas, colorantes artificiales, entre otras, mismas que generan los picos de azúcar en la sangre y no nutren en absoluto a nuestro organismo. En lugar de este tipo de antojos, debes llenar tu alacena de verduras, frutas, semillas o frutos secos. De esta manera, tendrás antojos llenos de nutrientes y no alimentos con productos químicos.

• Alimentos altamente procesados. Evita los alimentos que tengan la leyenda “listo para servir” o “listo para el microondas”. Estos alimentos son altamente procesados y están llenos de ingredientes obesogénicos que el cuerpo no logra digerir de manera correcta. Además, te llenan de toxinas que no necesitas. La comida entre más procesada y refinada, es más barata para los fabricantes y fácil de manejar y mantener en un estante sin que se eche a perder.

• Elimina los aceites vegetales. Una desintoxicación implica más que checar qué estas consumiendo, también es importante pensar  con qué ingredientes se están cocinando los platillos. Por ello, evita consumir aceites vegetales como el de girasol, soya y oliva.

• Consumo de sal. Como es sabido, la sal es un ingrediente no del todo nutritivo y menos si  se consume en altas cantidades y sobre todo si es sal yodada y flourada. Mejor, opta por sal de mar o sal rosa del Himalaya, son mucho mejores opciones.