Protestan más de mil, sobre tollocan
Ruleteros denuncian “atropellos” legales
Taxistas del Valle de Toluca aseguran que personal de Movilidad paraliza trámites y concesiones
(Foto: Archivo El Gráfico)
Alrededor de mil taxistas tomaron, simbólicamente, las instalaciones de la Secretaría de Movilidad, para denunciar que son víctimas de corrupción, pues la burocratización les impide brindar el servicio dentro de norma, mientras que a empresas como Uber se les protege desde el sistema.
En su protesta, los ruleteros crearon caos vial , al bloquear los carriles laterales de Tollocan de Carranza a Pino Suárez.
“Aplican la ley con fines de corrupción, nunca antes habíamos tenido los problemas que ahora tenemos, en los últimos dos gobiernos nos han reprimido demasiado”, comentó Ismael Luna, uno de los 30 mil taxistas afectados con las nuevas disposiciones.
Gastos. Ismael , se siente indefenso contra el Estado porque están apretando al gremio a través de la Secretaría de Movilidad y la policía estatal.
Lamentó que por faltas administrativas, tales como traer una licencia vencida, no traer tarjetón o no se estar al corriente con el refrendo, el Congreso del estado ha determinado multas de 30 a 40 mil pesos.
Los manifestantes puntualizaron que, por falta de licencia encierran dos meses el taxi o más y se cobran entre de 10 y 12 mil pesos de infracción.
“El problema es que aquí la licencia está muy cara y necesitamos que el gobierno baje el costo y que todo tipo de trámites se haga de manera eficiente. Hay una estructura institucional corrompida”, dijo.
Además, reprocharon que Uber opera sin mayores restricciones, ya que sus conductores no tienen que pagar concesión ni tener una licencia de conducir de categoría chofer.
Piden rodar. Asimismo, defendieron la actividad de los taxis colectivos, pues afirman que obedecen a la necesidad de la gente. Dicen que si no se ha regulado es porque el gobierno defiende el monopolio del transporte urbano que pertenece “a gente muy poderosa”.
La negativa mantiene en la clandestinidad a por lo menos a 48 mil conductores, pues cada auto tiene tres turnos de conductores, de quienes dependen sus familias.
Señalaron que el problema no es que no quieran estar dentro de la norma, sino que se quiere imponer un estatus desde el poder, con corrupción y burocracia que atropella sus derechos.
(Foto: Archivo El Gráfico)
