Es conocido como el kinder del basurero
Atiborran de mugre a niños
Los montones de desechos que dejan cerca de la escuela ocasionan ratas y enfermedades
Foto: Jorge Alvarado
Desde hace más de seis años hay un basurero clandestino sobre la banqueta del jardín de niños Telpochcalli, ubicado en San Miguel Apinahuizco, lo que ha generado ratas, enfermedades y hasta conflictos, en perjuicio de los 103 niños que ahí estudian.
Los padres de familia de esta escuela se quejaron que todos los días llega gente, algunos en carros lujosos, y tiran sus residuos sólidos afuera de la escuela, sobre la calle Eduardo Mendieta.
DEJAN DE TODO.
Señalaron que la basura se concentra en una longitud de hasta diez metros y aunque los carros recolectores pasan todos los días, a veces hasta por dos ocasiones, más tardan en recogerla que en lo que el lugar se vuelve a llenar de plástico, envolturas, muebles, ropa, llantas, y demás desechos que la gente abandona.
Se quejaron que lo anterior ha ocasionado fauna nociva que se mete al kínder, y enfermedades en la piel y posiblemente, señalaron, originó una epidemia de piojos que se registró hace algún tiempo en el plantel.
LOS AGREDEN
Comentaron que en varias ocasiones, los padres de familia realizaron campañas y guardias para vigilar que la gente no aventara sus desechos, pero fueron agredidos.
“Nos dicen: a ti qué te importa, ni que fueras muy limpia, por eso preferimos callar a que los niños sufran las represalias”, comentó una de las mamás que prefirió el anonimato.
Los inconformes aseguraron que no hay vigilancia en esta colonia, por lo que la gente llega y sin que nadie les diga nada, dejan su basura.
PIDEN AYUDA
Durante una reunión en la que estuvieron presentes representantes del ayuntamiento, de Seguridad Ciudadana y de las áreas del Medio Ambiente, los afectados pidieron solucionar este problema, destinar mayor vigilancia en la zona y aplicar sanciones a los responsables.
“Nos gustaría que hubiera tanto una patrulla aquí como allá abajo, alguien que esté vigilando, que ya no tiren basura porque llega hasta acá, inclusive lo llaman el kínder del basurero”, dijo otra de las inconformes.