Maciza de campeonato, en La Banquetera de Morelos

Al sur de Cuernavaca, en una avenida grande y transitada, Juan Carlos y Ángel Cantorán, padre e hijo, esperan afuera del local “Tacos El Chino”, con un trapo al hombro.

En este negocio con 35 años de trayectoria puedes saborear tacos de maciza, panza, surtido, costilla, cabeza, patitas y barbacoa, que también puedes pedir por kilo, sobre todo la de maciza, que es la favorita de los clientes.

Desde los nueve años, Juan Carlos aprendió el oficio de taquero gracias a su papá, al terminar las clases corría para el negocio a ayudarle a preparar los tacos suaves, poco grasosos, bien servidos y con un sabor inigualable.

Aunque las cosas no son como cuando el negocio se fundó, Juan Carlos, de 39 años, y Ángel, de 79, aún conservan las ganas por llevar a los paladares de Cuernavaca y sus alrededores, la sazón que se trajeron cuando emigraron de Puebla. 

“El Chino” proviene de una circunstancia básica y elemental: tanto Ángel como Juan Carlos tienen el pelo rizado y aunque hay un par de negocios más que ostentan el mismo nombre, afirma Juan Carlos, el original es el de ellos.

“La gente dice que los tacos están buenos; la unión con mi padre ha mantenido el negocio y ahí estamos”, dice Juan Carlos, mientras prepara la carne de chivo.

A la llegada de dos clientes, Juan Carlos afirma que todo le gusta en “El Chino”, pero sobre todo la satisfacción de seguir con la tradición familiar.

¿Dónde?

Avenida Estado de Puebla, número 18, en Cuernavaca.