LES LLUEVE METRALLA

Atizapán: Matan a dos hombres y a una mujer

Sujetos disparan desde una camioneta contra cuatro personas que platicaban afuera de una tienda

(Foto: Astrid Sánchez, El Gráfico)

(Foto: Astrid Sánchez, El Gráfico)

La roja 14/05/2016 10:08 Astrid Rivera Actualizada 10:11
 

Las balas disparadas ayer contra cuatro personas que se hallaban en la tienda El Caracol, en Atizapán, dieron en el blanco y sólo hubo un sobreviviente. Una mujer y dos hombres murieron por los proyectiles que los alcanzaron.

Eran las 15:00 horas y en la esquina de Naranjos y Camino Real, Segunda Sección de Adolfo López Mateos, un matrimonio y dos hombres platicaban. 

RAFAGUEADOS

De pronto una camioneta se acercó y sus tripulantes dispararon con armas largas durante al menos un par de minutos.

"Se escuchó bien feo porque eran balazos bien fuertes y no paraban, todos bajamos las cortinas y nos moríamos de miedo", relató una comerciante.

La zona fue abandonada, ninguna persona se quedó a presenciar la ejecución de tres personas.

Luego de que pasó la balacera y al salir la gente, encontraron el cuerpo de dos jóvenes sobre la banqueta: José Jiménez Sánchez, de 29 años, y su esposa Ana Laura Zaragoza Ventura, de 22 años.

La mujer tenía un impacto en el pecho, y él múltiples heridas en el rostro y tórax. Ambos estaban muertos.

Al interior de la tienda agonizaba el padre de José, Guillermo Jiménez Meza, de 60 años.

INTENTÓ REFUGIARSE

El hombre que logró entrar al negocio se desangraba sobre botellas de agua y de refresco. Se le apreciaban al menos cinco heridas y poco después también falleció por los balazos.

Según versiones de testigos, otro hombre fue rescatado con vida y trasladado al hospital, aunque esta versión no fue confirmada por las autoridades.

El sitio del ataque, que también cumple las funciones de una base de combis, fue señalado como zona roja, disputada por narcomenudistas.

"Ya la debían, se habían tardado en venir por ellos", dijo una mujer mientras lloraba en el lugar.

Más de 20 personas se reunieron en torno a la tienda de abarrotes; unas se abrazaban, otras lloraban y gritaban desconsoladas. Las víctimas eran conocidas y apreciadas en la colonia. 

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