Al criminal identificado como ‘El Ojos’
Ligan a dos bandas de narcos con homicidios, en Tláhuac
Contra uno de esos grupos la Procu capitalina ejecutó un cateo el viernes en Tetelco
(Foto: Archivo El Gráfico)
Un policía de Chalco asesinado en diciembre pasado junto con su hermano, y un supuesto ex escolta del alcalde de ese municipio, Ramón Montalvo, formaban parte de la banda de narcomenudistas que le disputa el control de la venta de droga en la delegación Tláhuac al criminal identificado como ‘El Ojos’.
A esas dos bandas se les atribuyen decenas de homicidios en esa zona, y contra uno de esos grupos la Procuraduría capitalina ejecutó el viernes pasado un cateo en el pueblo de Tetelco que derivó en un enfrentamiento que dejó cinco heridos, entre ellos un agente, y nueve detenidos.
PISTAS A CHALCO
Tirados en un camino de terracería de la delegación Tláhuac fueron encontrados el pasado 21 de diciembre los cuerpos de dos hombres. Uno de ellos tenía cubierta la cabeza con una cobija; el otro estaba enrededo en una sábana.
En el anfiteatro, ambos fueron identificados como los hermanos Óscar David, de 23 años, y Diego Terán de la Cruz, de 21, éste último era policía auxiliar del estado de México y ambos vivían en Chalco.
La procuraduría capitalina detectó que ambos presuntamente estaban vinculados con el grupo de narcomenudistas originarios de Chalco y fueron ejecutados por la banda de Felipe Pérez Luna, ‘El Ojos’, como parte de la disputa que ambos bandos mantienen en esa zona.
CRÍMENES LIGADOS
A finales de 2015, un presunto narcomenudista fue asesinado en las inmediaciones de la Unidad Deportiva conocida como ‘El Trinquete’, en Xochimilco. La procuraduría capitalina obtuvo declaraciones de testigos que ayudaron a identificar a los homicidas.
Con base en esa información, el 12 de diciembre de ese año fueron detenidas dos mujeres, un adolescente y Ricardo David Zaragoza Navarro, quien dijo vivir en Chalco y se identificó como escolta del entonces diputado federal del PRD Ramón Montalvo.
El 8 de junio de 2016, el testigo clave de ese caso, Eduardo Molota Zepeda, fue ejecutado junto con otros dos hombres a bordo de un auto estacionado en el pueblo de San Juan Ixtayopan, en Tláhuac.
Tras ese crimen, la procuraduría capitalina detectó al menos cinco más donde el principal móvil fue el narcomenudeo.
