El terrible mal del Labio y/o Paladar Hendido (LPH) congénito afecta a uno de cada 700 niños que nacen en México.
Este problema aparece cuando tejidos del rostro no se fusionan durante el desarrollo del feto, dejando una fisura, que puede estar en el labio y/o en el paladar.
Se trata de un problema grave contra el que batalla Smile Train, que ofrece cirugías gratuitas y tratamiento integral para niños con LPH en más de 85 países.
Origen del mal. No hay aún conceso médico sobre las causas precisas del padecimiento, lo cual junto con la difusión de información falsa contribuye a la discriminación de los pacientes, a lo que se dificulta el tratamiento.
Cosas ciertas y falsas. Smile Train enlista mitos y falsas creencias del LPH:
1. Mito: el término correcto es “labio leporino”, es incorrecto, hace referencia a la hendidura natural que tienen las liebres y conejos.
2. Mito: existe la creencia que los eclipses afectan el desarrollo completo de los bebés en la gestación y, para impedirlo, las embarazadas deberían utilizar un listón rojo durante el eclipse, para evitar ser afectadas. No hay evidencia científica.
3. Mito: el labio y paladar hendido se resuelve con una sola cirugía, esto varía de un paciente. Como mínimo, una cirugía es necesaria para reparar el labio y otra para cerrar el paladar.
4. Mito: el LPH es contagioso, totalmente falso. Las causas del LPH son multifactoriales pues involucran predisposición genética, deficiencia de vitaminas del grupo B como ácido fólico, aunado a los factores ambientales que pueden afectar el desarrollo del niño como el consumo de medicinas sin receta médica y la exposición al humo de tabaco, entre otras.
5. Mito: los bebés de cualquier raza, sexo o estrato socioeconómico pueden desarrollar LPH durante la gestación. Es más visible entre familias de bajos recursos ya que muchas veces ya que muchas veces no tienen fácil acceso a servicios de salud, atención prenatal o nutrición sana.
6. Mito: Son niños diabólicos o tienen una maldición, falso. Los niños que nacen con alguna característica física diferente han sido discriminados por ignorancia.
7. Mito: a los niños con LPH les cuesta más trabajo aprender, no es una discapacidad cognitiva, aunque entre sus consecuencias estén las dificultades para hablar u oír.
8. Mito: No se quita. La cirugía para reparar el LPH es simple y la transformación es inmediata.
10. Mito: es culpa de los papás - Smile Train da atención inmediata.
