Los instantes inolvidables entre una madre y una hija son incontables, algunos de ellos resultan imperceptibles, como es el vínculo que se crea cuando mamá peina y desenreda el pelo en los días de la infancia de una mujer, es inquebrantable, envuelto en momentos inigualables.
En vísperas del Día de las Madres, nada mejor que agradecer a las madres porque siempre están al lado cuando se les necesita, por ser modelos a seguir, confidentes y mejores amigas.
Belleza y amor. Los escenarios donde se mantienen esos lazos, ya pasados los años, son los salones de belleza, dicen especialistas en tratamientos del cabello de Kérastase.
Las madres y sus hijas cultivan su relación como una preciosa responsabilidad, al compartir sus experiencias en el tratamiento de la cabellera.
Historia de unión y belleza. Son ya más de 50 años de ciencia innovadora de la marca, que ofrece a cada madre e hija todo para lucir un cabello excepcional. “Cepillado, trenzado, desenredando los nudos para que no duela, el primer corte de cabello: estos momentos son donde comienzan las tradiciones”, dicen voceros.