Hoy en día existe la posibilidad de tener sexo todos los días, sin tener riesgo de embarazo y sin contraer enfermedades de transmisión sexual. Se trata de usar métodos anticonceptivos correctamente. Desafortunadamente, la información en la sexualidad no lo es todo, pues no es suficiente saber que existen, pues lo importante es usarlos y hacerlo correctamente.
No usar nada es aumentar la posibilidad de enfermarse y embarazarse, elegir solo usar solo un método (sin condón) es dar opción a la enfermedad; mientras que solo usar condón es abrir la posibilidad de un embarazo por mal uso de éste, que se rompa o que no se coloque a tiempo.
La combinación más segura es cuando cada quien usa lo que le corresponde.
Para los hombres el condón debe de ser un aliado del que no pueden prescindir, pues es el único método que protege contra las enfermedades de transmisión sexual y evita el embarazo en un 86% ya que su rango de error no está en su calidad sino en su mal uso; una regla básica es ponerlo antes de cualquier contacto con la zona genital de la mujer, previa a las salida cualquier fluido por el pene y cuando ya está erecto.
En cambio, las mujeres tienen más opciones, por ejemplo, entre los anticonceptivos hormonales esta los orales (la famosa pastilla en diversas presentaciones) que previenen en 91% el embarazo, y igual que los parches, los implantes son 99% efectivos, la Inyección anticonceptiva es un 94% eficaz, mientras que el anillo anticonceptivo vaginal lo hace en 91%. Todos ellos funcionan dejando cierta cantidad de hormonas que impiden el embarazo y con lo cual inhiben la fase de ovulación de forma que nunca de se paso a que el óvulo madure y pueda ser fecundado.
Por su parte, entre los anticonceptivos femeninos de barrera están el condón femenino que protege en un 79% de un embarazo no deseado; el capuchón cervical con 86% de eficacia, el diafragma con 88%. Estos como su nombre lo indica son métodos que ponen una barrera física entre el pene y el cervix con el fin de que el semen no llegue a la entrada del útero y logre alcanzar el óvulo en las trompas de falopio.
Entre los anticonceptivos que usan otros sistemas como los espemicidas (líquido que mata los espermatozoides a su contacto) y que impiden la implantación está la esponja anticonceptiva que previene en 79% embarazarse los espermicidas en diversas presentaciones (incluido en el lubricante del condón) que tiene un 71% de eficacia y el DIU con un 99 de éxito.
Sin embargo, de no ser el condón (masculino o femenino) ningún otro método protege contra ninguna enfermedad de transmisión sexual, por ello, los anticonceptivos usados sin condón pueden evitar el embarazo (y no en un 100%) pero no evitan la posibilidad de contagio de infecciones, por ello no es una técnica de sexo seguro.
Solo la abstinencia protege y evita el embarazo al 100% igual que la combinación anticonceptivo + condón; pues la esterilización así como la vasectomía son 99% seguros frente a un embarazo no deseado, pero son 0% seguros contra enfermedades de transmisión sexual.
