Disfrutan de sus cuerpos

Sexo 26/02/2016 11:55 Raúl Piña Actualizada 11:55
 

 Andrés:  Sólo bésame, no quiero que me penetres ni yo a ti.  Sólo tócame, gózame, siénteme, haz lo que quieras, pero no dejes de tocarme ni de ponerme loco.
Elías: Amo tu piel, tus muslos fuertes y llenos de músculos y de vellos.

Andrés: ¡Ahhh, qué rica es tu lengua.... no  ahí no... en los huevos no... me  dan cosquillas wey... jajajaja no... espera.... mejor chúpame el pito, así sí. ¡Qué caliente se siente  tu boca! No dejes de hacerlo... me pones bien “cachorro”... mmhh  no pares.

Elías: Bésame, dame tu lengua... qué ricos labios tienes... qué rico besas cabrón...

Andrés: No me muerdas, en el cuello... con cuidado papi, me raspas... ¡ahhhh,  muérdeme la oreja! ¡no mam... qué rico se siente!

Elías:  Nadie besa como tú.  Qué rico tu olor a loción, a cerveza, a mota, por cierto... estoy bien volado, me pones  loco y la hierba me pone más. Bájate los calzones... date la vuelta, te quiero morder las nalgas... chuparte todo... hasta donde se pueda.

 ¡Ahhh qué rico culo tienes papacito! pfff de revista, mira cómo me tienes, bien prendido.

Andrés: Y mira nada más cómo me pones tú a mí. Pásame el churro, préndelo... el  encendedor está en el buro...

Elías:  ¿En serio no quieres que te la meta?

Andrés:  No mi rey, la penetración no siempre es necesaria.  Me gusta tu cuerpo y disfrutarlo al máximo. Así como lo disfruto ahora.

Elías:  Mira cómo me la pones. ¡Estoy que reviento cabrón! Chúpame  tú, chúpame todo... ¡ahhh,  me gusta ver tu cara cuando te la metes en esa boquita!

Andrés: ¿Te gusta papá?  Hagamos un 69, me excitas como nadie.

Elías: Coloca la tuya junto a la mía,  bésame, no dejes de tocarme, ufff qué ricos tus brazos, tus hombros, tu espalda.

Andrés:  Estoy a punto amor... ya casi.

Elías: Yo también, vente en mi pecho....

Andrés: Ahí te voy. Tú también amor, vente en mi cara.

El cuarto con los vidrios empañados, el olor  a cigarro, a mota, a sudor, las sábanas mojadas, las chelas y la ropa en el suelo, la música apenas perceptible, los gemidos, los ruidos, los cuerpos, los miembros; blanco, mucho blanco por aquí y por allá, por el pecho, por la cara, escurriendo por los cuerpos llenos de deseo, de pasión, de amor y de muchas ganas de gozar el uno con el otro.

Andrés: No dejes de besarme... nunca dejes de hacerlo.

Elías: Nunca lo haré. ¡Me gusta tocarte tanto!

Andrés:  Vamos a bañarnos, pero antes déjame verte cómo caminas al baño y disfrutar cada centímetro de tu cuerpo.  Me encanta verte y más, tocarte y gozarte tanto.

Elías: No uses esa toalla, mejor dame tu lengua otra vez y límpiame para que me llenes otra y muchas veces de ti.

Hay parejas que han aprendido a conocerse y a gozarse usando la exploración física y emocional de manera divertida y que les lleva a encontrar placeres que no precisan de la penetración.

Elías y Andrés son de esos.  Viven con intensidad sus cuerpos y sus emociones de manera bastante particular, y por demás creativa.

Google News - Elgrafico

Comentarios