Como ex policías sabían que el miedo es la mejor arma a la que podían recurrir. El temor era su principal aliado al momento de detener, extorsionar y robar a indocumentados centroamericanos, en su paso por la ciudad de México hacia los Estados Unidos.
Durante meses, tres hombres operaron con total impunidad robando a los migrantes hasta que las denuncias acumuladas llevaron a un grupo de agentes encubiertos a montar un operativo para capturarlos.
Fue a principios de noviembre del año pasado cuando en la procuraduría capitalina se planeó la detención en la Central de Autobuses del Norte, ubicada en la delegación Gustavo A. Madero, donde esos hombres estaban al acecho de sus víctimas.
La única información con la que contaban era que se trataba de tres sujetos que usaban chamarras y placas similares a las de la Policía Federal y que se dedicaban a interceptar personas para verificar su nacionalidad.
Sin embargo, esa supuesta verificación de documentos era solo para despojarlos del dinero o las escasas pertenencias que llevaban. Un robo con el que según ellos, evitaban que los migrantes fueran enviados de regreso a su país.
Las denuncias indicaban que los integrantes de este grupo delictivo operaban al menos tres veces por semana, en ese punto desde el que salen diariamente decenas de autobuses hacia la frontera norte del país.
Los agentes vigilaron durante varios días los movimientos en la terminal hasta que detectaron a los tres falsos agentes.
AL ACECHO. Habían llegado como civiles a la terminal y ya en las salas de espera, se colocaron las chamarras, gorras y placas falsas. Los observaron a la distancia y se percataron que señalaban a las personas que estaban por abordar algún camión.
Cuando se acercaron a uno de los viajeros, ellos también se aproximaron cuidándose de no ser vistos.Escucharon cuando los pseudo policías le exigían 500 dólares a un hombre originario de Guatemala, para dejarlo continuar su viaje hacia Tijuana, Baja California.Cuando la víctima entregaba esa cantidad, que era todo el dinero que le quedaba para intentar cruzar la frontera, los agentes de la Policía de Investigación del DF intervinieron.
PLACAS FALSAS. El trío mostró sus placas para identificarse con los agentes capitalinos. Además trataron de amedrentarlos para que se retiraran con el argumento de que era un asunto federal.
“No es su jurisdicción parejas, déjennos trabajar”, dijo uno de ellos que trató de alejar al centroamericano. Pese a esto, los agentes no se dejaron intimidar y revisaron las placas de los hombres. Se dieron cuenta que no eran auténticas. También mostraron unos recibos de pago atrasados pero ni así lograron convencer a los policías.
Así fueron detenidos Héctor Zúñiga Martínez de 48 años de edad; Leopoldo Alejandro Gil Cardona, de 41 y José Trinidad Espinoza Villagómez de 38. Los registros que encontraron sobre estos tres hombres revelan que tiempo atrás formaron parte de la corporación policiaca pero actualmente estaban dados de baja.
OFRECEN LANA. Según se detalla en el expediente FACIT2/0245/14-11 de la Agencia Central de Investigación, al verse descubiertos los tres hombres ofrecieron 50 mil pesos a los agentes del DF para que los dejaran libres, pero éstos no aceptaron. El trío fue acusado de extorsión, cohecho y usurpación de funciones.
