Me llamo Daniel y hace 15 días me detectaron VIH, desde ese entonces estoy en un cuadro depresivo, siempre me cuidé, temía a esta enfermedad y en una noche de antro terminé en un cuarto de hotel desnudo sin saber cómo llegué hasta ahí. Sólo recuerdo haber bebido un whisky y de ahí no recuerdo más, me destruyeron mi vida para siempre. Hace dos meses inicié una relación con una gran persona, siempre me cuidé con él pues tenía las sospechas por los síntomas que presentaba y pues ahora que me enteré de mi enfermedad me alejé de él poniéndole muchos pretextos. Lo hice porque no lo quiero dañar, lo quiero y no merece pasar lo que paso yo. No sé qué hacer, siento que no podré más con todo ésto por más métodos que hayan, sé que no llegaré al final… sé que moriré.
Lamentamos profundamente tu situación, pero la depresión no ayuda y por lo regular acelera los procesos de debilitar el sistema autoinmune. Tú, como cualquier otra persona, vas a morir, y como todos los demás, no sabes cuando, que tengas VIH no te garantiza morir de ello. Requieres de apoyo emocional psicológico urgente para afrontar la situación, cuidarte para superar el problema y vivir tu vida dignamente. Habla con tu pareja para que no queden rencores y si es necesario pídele espacio para fortalecerte y poder saber cómo adaptar, en su momento sus vidas como pareja en esta situación. Primero debes aprender a cuidarte en todos los sentidos para después poder compartir tu vida con seguridad y confianza. Ve al un sicólogo que de preferencia atienda este tipo de casos.
Hola, sucede que hace aproximadamente ocho años conocí a un primo, es hijo de una hermana de mi papá. Un día no sé qué le pasó que me empezó a decir cosas que no son normales para mí, pues es mi primo y me lo dijo directo, que quiere tener sexo conmigo. Yo al principio me molesté y le dije que estaba loco. El día de su cumpleaños le escribí un mensaje felicitándolo, y empezó con la insinuación. El chiste es que ahora le dije que sí, pero tengo miedo, ya que yo ya soy casada y tengo dos hijos y siento mucho remordimiento, no sé si decirle que siempre ya no, pero me gustaría pasar un buen rato con él. Aconséjenme por favor! Gracias Tania G
Eso de que no sabes qué hacer es falso, sabes perfecto que no debes hacerlo, pero de alguna manera estás buscando que alguien te diga que lo hagas para no hacerte responsable de tus actos. Si estás casada y tienes hijos piensa dos cosas: 1.- ¿Es correcto traicionar a tu marido? Por muchas cosas que él tenga en contra, esa no es la solución, si tienen problemas lo correcto es arreglarlos y no estarse dando puñaladas por la espalda. 2.- ¿Es un buen ejemplo para tus hijos lo que piensas hacer? Mandarle una felicitación por su cumpleaños a una persona que te hace esas insinuaciones no es inocente, lo buscaste. Cuidado porque además al ser pariente toda la familia se involucra.
Nunca tuve suerte en el amor, siempre tuve empleos mal remunerados, que nunca me permitieron mejorar mi situación económica, un hermanito menor y una madre que mantener, ya que no tengo papá; ésto me llevó a prostituirme. Mientras trabajaba, conocí a un hombre maravilloso, cariñoso, trabajador que me enamoró poco a poco y me pidió dejar ese trabajo, dijo que se casaría conmigo y que nunca me dejaría, que no me faltaría nada, y yo por amor lo hice y le soy fiel, estaba muy feliz hasta que empezaron sus celos emfermizos que no piensa cambiar. Me dice que debo comprenderlo pues le hice mucho daño con mi trabajo. Dependo mucho de él emocional y económicamente. Cuando le hablo de casarnos dice que le dé tiempo, que no puede superar mi trabajo anterior, me controla, no me deja tener amigos, a mi no me importa porque lo amo y acepto sus imposiciones, pero pienso.... ¿no estaré perdiendo mi tiempo y dinero de mi trabajo anterior y cuando ya no le guste me dejará por otra? Sofía F.
Es evidente que tu pareja tiene una crisis que no sabe controlar, ya que para pocos hombres es fácil aceptar que su esposa haya estado sexualmente involucrada con cientos de hombres. Es una parte de su ego que se siente amenazado al saber que de alguna manera puede ser comparado o juzgado en su desempeño sexual con otros hombres con los que estuviste. Este es un riesgo que debiste haber previsto, igual que los celos. Pocas veces los hombres confían plenamente en sus parejas cuando se dedicaron a la prostitución, ya que es una actividad que se puede ejercer de forma clandestina para la pareja y obtener recursos económicos que hacen a la mujer menos dependiente de ellos y por tanto menos controlables. Lo mejor es que asistan a una terapia de pareja.
