Tengo un gran problema, el sexo anal con mi pareja va de mal en peor, pues antes lo hacíamos de vez en cuando, no mucho pero bueno, algo es algo. Una vez salió el pene manchado y le dio mucho asco, desde esa ocasión no lo hemos vuelto a hacer y eso fue desde hace por lo menos dos años. A mí me gusta, a él la verdad es que nunca le hizo mucha ilusión, pero lo hacía, ahora ya no sé qué hacer porque sé qué a él no le gusta y me siento mal, pensando que solo yo lo disfruto. ¿Qué me aconsejan?.
Eva C.
Es importante que en el sexo se tomen en cuenta los gustos y deseos de ambos, y cuando no hay acuerdo es bueno recurrir a una terapia sexual para determinar cómo acomodar las cosas para que ambos ganen. Evidentemente si a él no le gustaba el sexo anal y tuvo esa mala experiencia, es obvio que ya no quiera intentar, eso es algo que debe trabajar con el sexólogo más allá de que sea una práctica que llevan en su relación por quitar sensaciones negativas de su experiencia sexual, sanar su sexualidad. Por tu parte, quizá debas dejar de clavarte en ese placer y disfrutar los muchos otros que seguro tienen juntos, para que no, por esa parte, creas que tu vida sexual no funciona. El menú sexual de una persona y una pareja debe crecer con el tiempo no estancarse. Vayan al
sexólogo.
¡Hola! Soy una mujer casada y tengo la fantasía de estar con otra mujer, no sé si eso sea malo y si me atrevería hacerlo, pero el solo imaginarlo me excita mucho. A veces veo vídeos y me encanta cuando hacen la tijera o se chupan la vulva ¿estoy mal? ¿debo dejar estas fantasías? Maricarmen S.
No estás mal ni debes dejar de pensarlas, todas las personas tenemos fantasías sexuales que además de ser algo normal son otras formas que nos da la naturaleza para liberar energía sexual. Solo ten cuidado en querer hacerlas realidad porque mientras están en tu cabeza no hay problema alguno, pero en cuanto salen de la boca o llegan a la cama, se dan inevitablemente consecuencias que debes afrontar. Desde ser juzgada por este tipo de pensamientos hasta problemas emocionales y matrimoniales si llevas las fantasías a cabo.
Tengo problemas con mi pareja porque no me gusta el sexo oral. Ni hacerlo ni que me lo hagan. Mi pareja no me lo dice directamente, pero cuando anda muy abajo le saco la vuelta y no dejo que lo haga, no sé, prefiero complacerlo con anal, aunque la idea no me emociona tanto, solo lo hago por complacerlo, me gusta hacerlo, pero le digo no al oral. ¿Qué creen que piense él? Victoria D.
Obvio que a estas alturas no solo piensa, sino que ya sabe que no te gusta, porque simplemente no le permites llegar ahí. El asunto es que en el sexo hay que hablar, la comunicación es fundamental y no solo la corporal ya que el cuerpo nos dice que sí y que no, pero no nos explica el por qué. Y eso es algo que necesitamos saber (el por qué) para comprender a la otra persona y acoplarnos como pareja sexual sin miedos ni inseguridades. Lo mejor es que hables del tema con él, y que vayas a una terapia sexual pues no es sano que tengas sexo por complacer a tu pareja, tu propio placer parece que lo tienen castrado y reprimido lo cual es bastante grave, resuélvelo para que tengas una sexualidad plena y satisfactoria.
