He tenido dos experiencias amorosas consecutivas y ambas son muy similares. Nos conocimos, tratamos, enamoramos (una de ellas mi ex-esposa), y en el periodo de noviazgo, la intimidad fue excepcional, maravilloso y placentero. Al paso de los años, ambos casos cayeron en un retorno a lo espiritual, lo religioso... y ahí comenzó el declive. Hasta el punto de la ruptura matrimonial y noviazgo. ¿Qué sucede con la honestidad de las mujeres al momento de flirtear? Porqué me han tocado dos situaciones muy similares? Y por favor, no me digan que "yo atraigo" estas personas, porque es obvio que yo disfruto de la intimidad y sexo. Así que el aspecto espiritual, no es precisamente mi cualidad más llamativa. Muchas gracias. Alfredo G.
Quitando las corrientes metafísicas que dirían que sí atraes a este tipo de mujer, lo que es un hecho es que las escoges. Evidentemente hay algo de su personalidad que hace que te fijes en ellas de manera inconsciente. Todos nos relacionamos de esa manera con la pareja. Algunos psicólogos señalan que puede deberse a factores como situaciones de la infancia donde lo espiritual fue importante (quizá para tu mamá) o era muy alabada y reconocida esa parte (como con las personas que hacen yoga); o bien pese a gozar y disfrutar del sexo, en el fondo hay una negativa a pasar a otro nivel como por ejemplo tene sexo para tener hijos. Algunos hombres en realidad no quieren ser padres, y están en su derecho, pero el tema para sus parejas es tan fuerte que intentan o evaden hablarlo directamente y van dejando que cosas como estás ocurran para culpar a la situación del fracaso. Te sugerimos que busques ayuda con un educador sexual o experto en terapia de pareja y descubras qué pasa, pero hazlo cuando tu enojo haya pasado pues en la condición actual será difícil que aceptes tu errores y veas sin juicios los de ellas.
Soy casada, pero he notado que me atraen las mujeres. Nunca he tenido relación con ninguna, pero me gustaría tener una experiencia para poder definir qué es lo qué me gusta. Me siento muy confundida. Ayuda por favor. Lesli A.
Pese a que esta es una decisión muy personal, como estás casada y eso implica que en tu vida existe un acuerdo sexual con otra persona, es algo que debes hablar con él. No se trata de que le pidas permiso ni autorización sino de que expongas su inquietud y sepas en que medida le afecta eso. Es algo muy delicado porque estás hablando de prácticas lesbianas y eso puede ser muy fuerte para tu marido. Lo mejor que puedes hacer es acudir con un sexólogo y primero, definir si es solo una inquietud o parte de tu orientación sexual y ha estado reprimido, para después ver la manera en cómo tratarlo con tu marido.
Ojalá me puedan ayudar, llevo siete años y medio con mi novia y es lo que más quiero en el mundo. Soy estudiante y la conocí desde muy joven. Sin embargo, su madre me pone a 100. Su mamá tiene muchos problemas con el marido (papá de mi novia) y no sé si son imaginaciones mías o es que me tira la onda. Creo que me intenta seducir porque a veces cuando pasamos la calle me toma también del brazo o se espera a que le abra la puerta y esas cosas. La pregunta es, ¿qué hago, me la juego y me lanzo, o no hago nada y espero? y, si me lanzo ¿cómo lo hago?. La verdad es que llevo meses que no paro de pensar en ella y me encantaría llevármela a la cama, pero no sé qué hacer. Gracias. Gilberto F.
Cuando a uno le gusta una persona tratamos de ver miles de detalles para, a falta de cosas y palabras concretas, interpretar que también quiere con nosotros. En realidad, las actitudes de la señora más bien parecen tener el objetivo de quererte “terminar de educar” en caballerosidad y mejorarle a la hija el novio. Es de elemental respeto tomar a la madre de la novia del brazo u ofrecer el propio para pasar la calle, así como dejarla pasar primero y abrirle la puerta, son reglas de etiqueta básica. No te está tirando la onda. No creemos que tengas nada que ganar más que una tremenda advertencia por parte de ambos padres de no volverte acercar a su hija si se te ocurre decirle a la señora que la quieres en tu cama. Piensa bien las cosas y si no estás seguro de poder controlar tus gustos pide ayuda profesional con un terapeuta antes de que lastimes a toda la familia.
