Trabajador espía a dos teniendo sexo en jardín

Sexo 14/08/2017 05:00 Actualizada 12:36
 

Todos los lunes me levanto optimista, lista para salir con la ilusión de que voy a conocer a alguien que me haga feliz y por fin tenga yo a la pareja con la que pueda andar de arriba a abajo. Van pasando los días y me vuelvo intolerante, hostil y grosera, acabo el viernes peda y deprimida en mi casa y el fin de semana estoy cruda y enferma. La verdad es que me siento sola, harta de vivir esperando la llegada del príncipe que no aparece por ningún lado. ¿Qué hago para acelerar su llegada?

Marita la Solita

Deja de esperar al príncipe. Acaba con esas historias de infancia, tú tampoco me parece que seas una princesa, ¿o sí?. Dicen los que saben que para tener resultados diferentes, tienes que hacer cosas diferentes. Cambia tus rutinas, tu plan de vida. ¿Ejercicio tempranito? ¿Cine los jueves? Clases de inglés, camina las últimas seis cuadras al trabajo por otras calles, toma un café en distintas cafeterías. Entra a librerías. Diviértete y deja de pensar en esperar a alguien.

He sido un trabajador leal en casas con jardines grandes por la zona de Altavista, durante muchos años. Hace poco, en lo que yo me echaba una siesta, escuché a dos jóvenes esconderse entre las ramas y besarse escondidos bajo la sombra de un árbol donde suelo descansar. Por supuesto, no me moví. Me excitó muchísimo saber que a mi lado dos jóvenes hacían el amor y de la emoción tuve una eyaculación y hace tiempo yo no la tenía. Poco después me di cuenta que el acto había sido entre dos hombres. Aún así los he seguido espiando, ¿cree usted que voy a terminar por volverme homosexual si los sigo frecuentando?

Clemente, el Caliente

El sexo es sexo, es perfectamente normal que usted se haya excitado al saber que una pareja hacía el amor. El espiar un acto homosexual lo va ayudar a ver el amor entre dos hombres como algo más natural y quizás mas adelante si  tiene la curiosidad de hacerlo con un hombre le va a ser más fácil probar, eso  lo puede hacer homosexual o no, dependiendo la experiencia vivida.

Hace poco, le conté a mi mamá que tengo una amiga lesbiana y que nos hemos hecho buenas amigas, pero la verdad es que nosotras somos pareja. Ella comenzó a decirme que la homosexualidad no tiene nada de malo, pero siempre termina afirmando que está muy contenta de que a mí me gusten los hombres y sea normal, me dice que me enfoque en mis estudios. Y es que mi mamá se dice ser muy abierta, pero cuando se trata de mí no quiere conocer mis secretos. ¿la siento y se los cuento?

Ivanka, la FranKa

Abre tu corazón con ella; muchas madres todavía se escandalizan de que sus hijos sean homosexuales, pero ninguna se ha muerto con la noticia. Te recomiendo busques el momento y la manera, se honesta con ella y desde el principio hazle saber que es importante para ti que te acompañe siempre.

Lo que yo más quisiera es que mi mamá ya no viva con mi padrastro, es un hombre detestable que toma hasta quedar borracho y que desde que llegó a la vida de mi madre, sólo le hace pagar con lágrimas el dinero que nos da. He hablado con mi mamá y no la quiero dejar con ese tipo, pero yo tengo claro que me quiero ir a vivir con mis abuelos. ¿Piensas que es un acto egoísta?

Almeja, la que se Aleja

No es egoísta. No tienes que compartir techo con el novio de tu mamá si te sientes incómoda; es común en muchos hogares mexicanos que los hijos de un primer matrimonio acaban por vivir con los abuelos. Te recomiendo hablar con tu mamá, explicarle tus razones y quedar de verse las dos solas varias veces a la semana, pueden intentarlo, seguro van a construir una relación más sana de esa manera.

Me pongo guapa, me arreglo el pelo, me pinto el ojo, me visto bonita y no puedo salir del mi cuarto, porque me da pena. Pena con mi papá,  con mis tíos, hasta con mis amigos, porque mi mamá, mis tías y todas las niñas de la cuadra saben bien que aunque nací hombre ‘yo soy mujer’. ¿Qué hago para terminar con este sufrimiento?

Elekta, la Coqueta

Cuesta mucho trabajo decir las cosas que son obvias y que muchos no entienden. Habla con tu madre, con tus tías con esas mujeres con las que te sientes cómoda. No estás sola, no eres la única y lo que sientes no es anormal. Busca una terapia, expresa tus sentimientos, un grupo de ayuda profesional.

Me sucede que cuando hago el amor me concentro en mi cuerpo y me meto a mi mundo, y es como si pasara a una dimensión distinta y poco a poco me trepara en la energía que se concentra arriba de mí y cuando llegó al orgasmo ‘exploto’ y hay una pausa, silencio hasta que de la nada abro, los ojos y me encuentro dentro de mi cuerpo. Observo. Hasta me desconozco y no sé por unos instantes ni quién está junto a mí. Después, lentito me incorporo y vuelvo a ser yo. ¡Qué, pena! Me han dicho que me vuelvo una dragona, ¿será?.

Pamona, la Dragona

Qué rico volar como dragona. Eso se lo deseo a toda mujer que se entrega al placer; lo que sientes le llaman en francés la petite mort, (la pequeña muerte), significa la breve pérdida o debilidad de consciencia y se refiere específicamente a esa sensación de orgasmo que describes como a una pequeñísima muerte. ¡Qué no te dé pena! Disfruta al máximo.

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