Desde la barrera

12/06/2014 19:58 Gabriela Sánchez Actualizada 22:25
 

De no jugar en Brasil 2014, el portero mexicano Guillermo Ochoa se habría convertido en el único futbolista que asiste como suplente a tres mundiales sin ver acción un solo minuto. Esa estadística se anexa al calvario que ha sufrido Paco Memo en su trayectoria con la Selección mexicana. Un curioso tormento, porque no es talento, sino suerte, lo que le ha faltado cuando porta la playera tricolor.

Ochoa ha sido relegado por timoneles de la Sub 23 y, cuando jugó, le tocó la mala fortuna de ser parte del vergonzoso conjunto nacional que no calificó a Juegos Olímpicos al mando de Hugo Sánchez.

¿Qué hubo un escándalo por dar positivo de clembuterol? Guillermo estaba involucrado. Si hay alguien que ha soportado diez años de pelear la titularidad y ser constante sombra de Jesús Corona, ése es Guillermo.

En el peor América de la historia, en 2008, el tapatío estuvo presente. Y por si le faltaba experimentar un descenso, ya lo vivió recién con el Ajaccio francés.

LO QUE NO FUE, ¿NO SERÁ?
Guillermo Ochoa es el único portero mexicano con nivel competitivo que ha militado en el futbol europeo, pero eso no ha sido suficiente para asegurarle la titularidad en el Mundial de Brasil 2014.

En la cita amazónica se perfila para defender el marco tricolor José de Jesús Corona, portero del Cruz Azul. De ser así, Memo pasaría en la banca su tercer magno evento, a sus casi 29 años.

Hace ocho, cuando tenía 21, todo era esperanza para él. El técnico Ricardo La Volpe lo eligió como tercer portero en el Mundial de Alemania 2006. Se esperaba que el joven arquero tomara experiencia para adueñarse de las redes cuatro años después, pero no fue así.

Aunque todo apuntaba que sería titular en Sudáfrica 2010 bajo la conducción de Javier Aguirre, el timonel optó por la experiencia de Óscar Pérez para defender el marco mexicano. Fue un error en un amistoso en Torreón ante Corea del Norte el que restó puntos a Ochoa y esfumó su anhelo de ver minutos en un mundial.

El drama no paró ahí. El guardavallas tapatío se perdió buena parte del Bicentenario 2010 a causa de la pretemporada con El Vasco y tuvo que dedicarse a recuperar la confianza de Manuel Lapuente, su técnico en el América, para el torneo Apertura 2010.

En medio de ese trago amargo brillo una luz con la oportunidad de convertirse en el primer arquero mexicano en la Liga Premier. El Fulham se lo negó.

RELEGADO DE JUEGOS OLÍMPICOS
Los Juegos Olímpicos son otro sueño que la mala suerte apartó de Paco Memo y es que varias razones le han impedido aparecer en esta justa como parte de la selección Sub 23.

El infortunio se remonta a 2004. El tapatío asistió al certamen de Atenas, pero nunca se quitó la casaca de suplente, pues Jesús Corona fue titular en la escuadra dirigida por La Volpe.

Cuatro años más tarde, Guillermo fue arquero titular en la llamada “selección de la vergüenza” que, comandada por Hugo Sánchez, no logró calificar a los Olímpicos de Beijing al ser eliminados en el eliminatoria de la Concacaf realizado en Carson.

TAMBIÉN SUFRIÓ ESCÁNDALOS
La historia de Memo en la Copa Oro también es la de un tipo que ha roto cientos de espejos o pasado debajo de varias escaleras.

En la edición de 2009, el cancerbero fue titular todo el torneo en el que México se coronó. Pero en 2011 su mala suerte volvió. Ochoa arrancó de inicio en el duelo en el que México derrotó 5-0 a El Salvador, pero días después se informó del dopaje de cinco seleccionados por clembuterol. Guillermo era uno de ellos y ya no jugó. Las redes tricolores terminaron bajo la tutela de Alfredo Talavera.

Esta antología de infortunios la completan el haber alternado la titularidad con Oswaldo Sánchez en la Copa América de 2007, custodiado la portería del peor América de la historia en 2008 y un descenso con el Ajaccio francés en 2014.

OTROS CASOS

El portero mexicano Antonio Mota fue suplente dos Mundiales (1962 y 1970) y no jugó ni uno. Igual le sucedió a El Tubo Gómez (1958 y 1962)

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