México Duele. Es la frase que he leído en redes sociales en los últimos días. Así se manifiesta el pesar social por vivir en un país donde 43 jóvenes que aspiraban a ser maestros rurales pueden ser calcinados y el responsable de la justicia apenas salga para informar tardíamente los hechos y decir que “está cansado”.
Sin embargo, en las redes sociales también se pueden encontrar personas y proyectos que no se cansan, a pesar del esfuerzo que implica realizar acciones para que el México y su gente siga adelante, trabajando por mejorar las cosas.
Livia Olvera, Madinina Mauvois e Irene Valle se unieron para acercar a la gente de esta caótica urbe una opción para comer mejor, cuidar su salud y, al mismo tiempo, apoyar a los pequeños productores rurales de los alrededores. Así nació la ecotienda “Flor de Alcachofa”.
Si uno camina por la calle Pennsylvania, en el Barrio de San Lucas de Coyoacán, tal vez sin querer se siga de largo, sin mirar aparentemente una cafetería como hay muchas. Pero no es así. Flor de Alcachofa es una ventana al mundo de la cosmetología natural, la agricultura y la ganadería orgánicas, al mismo tiempo que es una puerta a la alimentación sana.
Apenas hace seis meses que Livia encontró el pequeño local y sintió que sería el lugar perfecto para un proyecto que ya tenía tiempo platicando con sus amigas: montar una tienda de distribución de productos orgánicos, con servicio de cafetería y tetería, pero en un esquema de comercio justo y consumo responsable.
Mientras me invita una suculenta agua tibia de mandarina con miel producida en Cuajimalpa y un pan integral con ate hecho en ollas de cobre por mujeres mayores de Guanajuato, gratinado con queso producido en una granja orgánica, Livia me explica que el concepto de consumo responsable tiene que ver con el conocimiento que la gente debe tener sobre los productos que compra. Es decir, de dónde vienen, quien los produce, cuántos desechos se producen, a dónde van a dar y cómo afecta o beneficia al cuerpo y al medioambiente el consumirlos.
Flor de Alcachofa apenas nació el 3 de mayo pasado. A pesar de ello, unos 60 productores rurales ya han sido beneficiados por contar con este centro de distribución.
En la tienda no sólo se pueden comprar verduras orgánicas cosechadas en las chinampas de Xochimilco o quesos, pollo y huevo orgánicos, flores de maguey, miel y sus derivados, galletas y productos de amaranto, pan integral, ate, mermelada, te o café para consumir en los alimentos de su carta, también los pueden comprar para preparar en casa e incluso acceder a una línea de productos para la belleza, la salud y el cuidado personal, y otra para la limpieza de la casa.
Irene se siente orgullosa de que cada producto de la tienda tenga una historia detrás. Al consumirlos te hablan del productor. Mientras sentía bienestar al beber mi agua de mandarina, pensaba en la cooperativa de mujeres de Cuajimalpa que producen más productos derivados de la miel de los que hubiera imaginado.
Este esquema de negocio les permite contribuir a rescatar tradiciones e incluso impulsar el trueque, además de promover el uso de envases reutilizables o reciclables.
También buscan romper con el mito de que el consumo de productos orgánicos y ecológicos es elitista. Y en efecto, los precios que se pagan por los productos en Flor de Alcachofa, no son mucho más altos que los que se encuentran en el supermercado en productos industriales.
Livia, Madinina e Irene han aprendido a hablar con productores, no con industrias y se ven a sí mismas como un puente de comunicación entre el saber tradicional y la necesidad de pensar mucho más lo que consumimos como sociedad.
ATENTO
Si tú produces algo natural, integral, orgánico, higiénico y respetuoso con el medioambiente, acércate a Flor de Alcachofa:
Visítalas en Pennsylvania 19, Barrio San Lucas, Coyoacán.
En Facebook: www.facebook.com/alcachofaenflor
Teléfonos: 5539695104 y 5536772738
Correo electrónico: [email protected]
