BOCANADA

04/03/2015 04:30 Samuel Ocampo Actualizada 02:45
 
—¿Quién es Tatiana Palacios Chapa?
 
—Una mujer que desde niña quiso ser cantante. Soy muy apasionada, muy entregada  y trato de hacer mi trabajo más del cien por ciento, y darle lo mejor al público. Como persona, también muy entregada. Me gusta siempre estar de buen humor, muy positiva, reírme mucho, rodearme de  buena vibra,  pensar en lo bueno.
 
—¿Edad? 
 
—46, recién cumplidos.
 
—¿Estado civil?
 
Comprometida, muy emocionada.
 
—Naciste el 12 de diciembre, ¿eres guadalupana?
 
—Sí, por supuesto, guadalupana de corazón. No me pusieron Guadalupe, pero era uno de mis nombres propuestos. Mi mamá quería que me llamara Olimpa, porque en el 68, que nací, fueron las Olimpiadas de México, y luego mi papá quería Tatiana y mi abuelita quería Guadalupe, porque nací el 12. En total, ganó mi papá.
 
—¿Por qué  naciste en Estados Unidos?  
 
—Mis papás se casaron y mi papá estudió su maestría y doctorado en Economía en la Universidad de Wharton. Entonces, pues mi mamá ya no se pudo regresar para que yo naciera aquí en Monterrey. Fui un caso, de verdad es un milagro, uno en un millón, y creo que uno de cinco millones sobreviven la madre y el hijo. Yo nací en  un parto pélvico incompleto invertido.
 
—¿Qué música traes en tu Iphone?
 
—Traigo a Michael Bubble, Ofunkillo. Traigo mis discos, por supuesto, para ensayar, traigo de todo, el ‘play list’ del show infantil y pop.
 
—¿De quién eres fan ahora?
 
—Yuri siempre ha sido mi hit.  Me encanta su voz, sus canciones,  la quiero tanto  ¡más de 30 años de conocerla! Me encanta Ana Gabriel, además es mi súper amiga también. ¡Me fascina el rock! El Tri  nunca lo dejo de oír. Me gusta Camila. 
 
—A los 15 años iniciaste tu carrera siendo el Rostro de El Heraldo de México, ¿cómo llegaste a ese momento?
 
—Porque desde los 14 años yo había ido a audiciones. Primero,  para Vaselina. Julissa había  invitado a mi hermano, que ya era cantante y famoso, y yo era su bailarina y corista. Lo  invitó a hacer la audición de Vaselina y yo también fui.  Julissa me dijo  que no quedaba en  la obra porque ya estaba muy desarrollada y era para niños y yo ya estaba curvilínea. Tenía 14, pero ya me veía como ahorita, me veía ‘curvibuena’, ja, ja, ja, ja. Entonces me quedé llorando y me dijo Julissa que al otro día se haría la última audición para una obra de adolescentes  llamada Kumán,  obra de Irene y Miguel Sabido, y que era la primera ópera rock mexicana. Mi papá me llevó y me quedé. No me habían dado personaje,  pero yo estaba feliz con lo que fuera en la obra de teatro, con hacer mi sueño realidad. Después de un mes que hice otros ensayos, me dieron el personaje estelar femenino y ensayé  durante seis meses. Eso fue en noviembre, en diciembre cumplí 15 años, y en febrero de 1984 me nombraron rostro de El Heraldo.
 
—Han pasado 31 años ya, ¿qué has sacrificado?
 
—Cuando te apasiona lo que haces, no lo ves como un sacrificio. Lo ves como gajes del oficio y como algo que tienes que pasar, y la vida es difícil y tienes que hacer cosas para poder realizar tu sueño.
 
—¿Cómo le has hecho para mantenerte vigente estas tres décadas? Has pasado por casi todos los géneros musicales, ¿te falta grupero?
 
—De infantil a pop, de pop otra vez a infantil. Lo grupero ya lo  he hecho. La base es la constancia, la dedicación, las ganas…
 
—¿Cuál es el momento que más recuerdas de tu vida artística?
 
—El primer programa de televisión en que me conocieron internacionalmente, que fue en las Fiestas de Octubre de Guadalajara en el Auditorio Benito Juárez, en Siempre en Domingo. Fui el lanzamiento. Tengo muy presente esa experiencia porque canté ante unas 15 mil personas, con micrófono de cable, además, porque no había inalámbrico. Recuerdo que me dio mucho nervio porque Raúl Velasco preguntó si les había gustado  mi música y que si les había gustado Tatiana. Y si toda la gente hubiera dicho que no, a lo mejor ya no estaría en esta carrera.
 
—¿Qué le debes a Julissa?
 
—¡Ay pues que me haya dado la información de esa audición! Como que vio que tenía talento, que tenía ganas y me vio preparada. Entonces le agradezco que me haya recomendado hacer esa audición. No me recomendó con palancas. Tuve que hacer las audiciones desde cero.
 
—Desde hace 14 años eres otra Tatiana, ¿qué has aprendido en esta nueva etapa?
 
—Que soy la misma; pero más fuerte, más observadora, más resistente.
 
—Una de tus canciones es “El amor nunca se calla”… ¿has cometido errores por el amor?
 
—Pues yo creo que ninguno. Siento que el amor lo conocí hace apenas siete años.
 
—¿Tiene nombre?
 
—¡Sí! Alejandro.
 
—¿Has aprendido a cruzar los puentes sin miedo?
 
—Ja, ja, ja, ja….ningún puente me da miedo. Me encantan las alturas, la adrenalina, vivir así, con retos. Todos son retos.
 
—¿Puedes cruzar el puente sin ver hacia abajo, sin temor?
 
—Es viendo hacia arriba, hacia adelante.
 
—¿Has probado las drogas?
 
—A lo único que soy adicta es a la Coca Light.
 
—¿Ya tienes  candidato para la próxima  gubernatura o aún piensas tu voto?
 
—Ya lo tengo, pero no te lo voy a decir…
 
—¿Hombre o mujer?
 
—No te digo… el voto es secreto.

 

Google News - Elgrafico
Temas Relacionados
Bocanada

Comentarios