México protagoniza otra bailada y cae nuevamente ante Argentina

MENDOZA.– Se acabó la pesadilla para Ricardo Ferretti como técnico interino del Tri. Y es que ayer México cayó nuevamente 2-0 contra Argentina, en su segundo juego amistoso, en el estadio Islas Malvinas.

Con este marcador los pamperos le repitieron la receta del pasado viernes a la Selección Mexicana, por idéntico marcador, en duelo sin calidad.

Con este revés, el “Tuca” deja el banquillo nacional con un saldo de cinco derrotas y un triunfo en este interinato, así que Tri queda a la espera de la llegada del argentino Gerardo Martino.

Fue un primer tiempo malo, donde lo mejor fue la anotación de Mauro Icardi, en un gol que Ferretti califico como “de vestidor”.

Corría el minuto 2 y Mauro Icardi se metió al área, se quitó a dos defensas y mandó cañonazo al fondo de la red, para el 1-0.

Pero después de la anotación, la gente que acudió al estadio Islas Malvinas, se echó más de un bostezo.

México respondió tibiamente al minuto nueve, con un remate con la pierna derecha de Henry Martin, pero la pelota se fue por arriba.

Para el minuto 24, el juego se desarrollo en el medio campo, donde se tornó soso y sin emociones.

Luego, al 34’, Santiago Ascacibar fue amonestado por una falta sobre Brizuela, a quien le aplicó una peligrosa barrida sobre el pie derecho.

Y en el 37’ fue Marcos Acuña quien mandó riflazo por arriba, para suerte del portero Jesús Corona.

En el minuto 45 vino lo mejor: ¡Se acabó el primer tiempo!, lo que puso fin al aburrimiento del público.

PAN CON LO MISMO. Para el complemento Argentina le dio mayores libertades al conjunto azteca, que llegó al área pero sin concretar.

El arribo más peligroso del equipo mexicano se dio al minuto 76, con un disparo de Jesús Gallardo, que el portero Gazzaniga desvió a una mano para evitar el empate.

Los locales buscaron al contragolpe y Dybala, que recién había ingresado, puso el 2-0 al 86’: Giovanni Simeone escapó por el costado izquierdo y cedió para Dybala, quien dentro del área remató de izquierda.

De esta manera se cierra un año lleno de mediocridad para la Selección Mexicana, que en el Mundial no llegó al quinto juego y en el interinato de Ferretti perdió cinco juegos de seis.