El león y Tigres se enfrentarán en la final y van por todo

MONTERREY.— Gran final. Pinta bonita. El juego de juegos. El todo o nada. Tigres recibe al León en la ida por el título. Una final inédita; nunca se habían enfrentado en esta fase.

Será una final con mucho para definir. León, un clásico en la Liga Mexicana, cuenta con siete títulos, si gana alcanzará al Cruz Azul en ocho, pero si los Tigres son los triunfadores, igualarán a los verdes. Por eso es el todo o nada. 

Ricardo Ferretti, técnico de los regios, también tiene su historia especial. Él solo ha ganado seis Ligas (cuatro con Tigres, una con Chivas y otra con Pumas), una más y alcanzará a Ignacio Trelles. 

Por el lado leonés, el técnico Ignacio Ambriz, ya con varios años en el medio, tratará de al fin ganarse el respeto como técnico ganador con su primer campeonato de Liga. Ya tiene uno de Concacaf con el América y otro de Copa con el Necaxa. Se espera una ida especulativa, con bajas importantes para ambos: Jesús Dueñas y Rubens Sambueza. La mesa está puesta para el duelo de felinos.

QUIERE SER REY. A pesar de su edad, Joel Campbell (26 años) ha recorrido el mundo. Ha jugado en Costa Rica, España, Francia, Grecia, Inglaterra, Portugal, Italia y ahora en México.

La realidad es que parecía que su carrera se iba en picada cuando el León lo repatrió al continente americano; pero no, se ha revalorizado y está a las puertas de un nuevo título, ya que sólo ha ganado tres: uno en tierras ticas (Liga, con Saprissa), otro en Grecia (Liga, con Olympiacos) y uno en Inglaterra (Community Shield con el Arsenal).

Campbell, nacido en el pueblo Desamparados San José, dice estar feliz por la oportunidad que los Esmeralda le dieron: “Estoy contento, muy agradecido con esta institución por confiar en mí y sólo queda corresponderles entregándome al 100 por ciento para tratar de ganar este título. Sólo nos falta dar este pasito”.

La octava estrella junto al escudo, “es algo que nos hemos trazado, es algo histórico para nosotros y nuestras familias. Queremos darle ese gusto a toda esta gente que viene a vernos en cada juego y a todos los que nos apoyan en casa”. 

Campbell jugó en el Frosinone de Italia antes de llegar a México, y eso de jugar es un halago, ya que sólo estuvo en la cancha en cinco partidos, y no anotó. Así que esta es su oportunidad para renacer: “He trabajado muchísimo por este momento y aquí me han ayudado mucho para sentirme tranquilo, como en casa y que sólo me concentre en jugar”.