Con pura garra, Tigres imponen frente a Rayados para avanzar a la final del torneo

Por Christian Mendoza

MONTERREY.— Los Tigres alcanzaron su duodécima final de Liga, gracias a que fueron mejores en la fase regular del torneo, pero no en la serie semifinal en la que empataron en el global (1-1), contra el Monterrey, al beneficiarse de su mejor posición en la tabla.

Nahuel Guzmán se vistió de héroe al detener todos los disparos de los Rayados, y Guido Pizarro en el mártir al marcar el gol del pase, pero a costa de su integridad física. 

Triunfo por la mínima en la vuelta (1-0), luego de que los Rayados dieron el primer golpe en casa. Pero los universitarios, entre drama, hicieron respetar el Volcán, motivados por su gente y por el recuerdo del fallecido Osvaldo Batocletti. Con poco, los de Ricardo Ferretti consiguieron mucho: otra final para adornar el irreverente ciclo de dominio que han ejercido, suficiente para romper con la paridad de su vecino en cuanto a clásicos regiomontanos, con 42 a favor de los auriazules y 41 ganados del otro bando. 

Los de la UANL respondieron a la presión, al necesitar cualquier triunfo, pero sin recibir gol. Y para resolver la llave, Guido Pizarro se encargó de ser el hombre del partido, al abrir el marcador literalmente arriesgando la vida, al conectar de cabeza el balón, pero también con la cabeza de un defensor. 

Pese a que Guido Pizarro terminó por ser trasladado a un nosocomio, la hostilidad y la intensidad hizo que jugadores como Luis “Chaca” Rodríguez también sufrieran aparatosos golpes, mientras que el parado táctico de Diego Alonso sufrió por la lesión del guardameta Marcelo Barovero.

Así que fue engañoso el pase de los Tigres de Ricardo “Tuca” Ferretti, luego de avanzar por la misma forma en los cuartos de final ante Pachuca. Pero el fin justificaría los medios, con lo que los felinos se confirman como los primeros finalistas y con un triunfo que fue endulzado con el silbatazo final y el estallido de fuegos artificiales, en el Estadio Universitario.