Blue Panther luce como en sus mejores noches y lleva al equipo lagunero al triunfo

Ataviado con la máscara que lo convirtió en leyenda de los cuadriláteros, Blue Panther volvió a portarla en la arena México, el mismo escenario donde una década atrás la entregó a su verdugo, y celebró con una victoria sus 40 años como luchador profesional.

El maestro lagunero parecía aquel joven que rompía el espacio aéreo en el Toreo de Cuatro Caminos, tras la incógnita, el veterano cobró nuevos bríos y soportó la explosión de rudezas de los nuevos dinamita, quienes aliados a su tío Máscara Año 2000 intentaron de todas las formas posibles echar a perder el festejo.

Con la batalla igualada a una caída por bando, los científicos labraron el camino hacía el triunfo con vuelos espectaculares del propio Panther, Black Warrior, Panterita del Ring y Euforia, para que Genaro Vázquez regresara al centro del ring para finiquitar las acciones con una implacable palanca al brazo contra Chucho Reyes, el dinamita mayor que no soportó el castigo.

Minutos antes, Panther fue ovacionado por el respetable coliseíno que hace años lo hizo parte de sus consentidos, y así les respondió: “En cuarenta años, todo lo que he hecho es porque todos los que forman parte de la lucha libre han estado siempre a mi lado, solo puedo decir gracias, a la lucha libre y a los que me permiten ser luchador”.

Testigo del paso de varias generaciones sobre el ring, Panther recibió también a la nueva encargada del rumbo en el CMLL, Sofía Alonso, quien le agradeció por el legado que ha dejado en la empresa, “no solo por lo que ha hecho, sino por la semilla que está en sus hijos que seguirán siendo parte del Consejo Mundial de Lucha Libre por muchos años”.