El próximo 28 de junio Gloria Trevi se presentará en la Arena Ciudad de México con un espectáculo que se titula ‘Diosa de la noche’, con el que pretende reencontrarse con su público en un show que también representa uno de los grandes abusos de la industria del espectáculo, pues el costo de los boletos fluctúan entre los ocho mil seis cientos hasta 140 pesos, en donde lo mejor es usar la imaginación, pues el público verá nada.

Habrá quien asegure que el show es único, pero en nuestro país 8 de cada 10 mexicanos que gana hasta 13 mil pesos al mes (según el INEGI) y más allá de la justificación profesional, con estos precios, lo único que está demostrando la Trevi y su equipo –cuyo principal artífice es su esposo el estrafalario Armando Gómez- es que tienen el ego más grande que la misma arena y que lo que menos les importa es su público.

No dudo que -como es costumbre- esos sean los boletos que se terminen primero, pero manejar esos precios, afecta a la industria, sobrevalora los espectáculos, esta medida lo único que provocará será una escalada de precios sin justificación y según el ego del artista.

La capacidad artística de Gloria está respaldada por la cultura del esfuerzo, es un producto para algunos hasta inspiracional –aclaro, la parte artística- y estos excesos son una tontería que a la larga le va afectar, pues la volverá inalcanzable. Recuerdo que la única estrella que condicionaba sus fechas a los empresarios a cambio de ofrecer precios accesibles y lugares dignos para su público era: Vicente Fernández.

A casi dos meses de nombrarlo director de Distrito Comedia, Israel Jaitovich ya comenzó a cambiar el canal de Televisa Networks y esta semana presentará un nuevo programa que trae una propuesta muy fresca. Se llama 5x8 y reúne a nuevos y muy buenos comediantes encabezados por El Indio Brayan.

En Azteca andan insoportables, pues serán la nueva ventana de La Voz. Pero sin duda lo que más llama la atención es que La Voz… México tendrá además de su edición habitual, una temporada con talentos de la tercera edad; por lo que Alberto Ciurana picudo de los contenidos en el Ajusco ya anda buscando a sus contemporáneos para sumarle al proyecto. No hay que olvidar que en la época del festival OTI (allá por los ochenta), Alberto era uno de los principales pilares del proyecto liderado por Raúl Velasco y su trato con la nostalgia es de primera mano. 

Por hoy es todo, nos leemos la próxima aquí, donde quizá hablemos de ti.