Cuando las cosas se cuentan bien

Lupita Martínez

OPINIÓN 31/07/2019 09:42 Lupita Martínez Actualizada 09:43

En ‘Cita a ciegas’, Victoria Ruffo sale de su zona de confort, pero mire usted público siempre conocedor, la verdad es que esto de la comedia a Victoria no le cuesta mucho trabajo, se le da natural. El reto en realidad está en que el público la conozca en un personaje distinto a la protagonista víctima, tan tradicional en las telenovelas.

Lo bueno del personaje de Maura, que interpreta Victoria es la relación que tiene con sus dos hijas de diferentes matrimonios, es un punto de coincidencia que tendrá con absolutamente todo el público femenino que la vea, porque todas hemos sido hijas y algunas hemos sido madres. Es un tema inagotable, visto en películas, series, teatro y siempre es actual, y como todo, el éxito depende de cómo se cuenta.

El tono de ‘Cita a ciegas’ es divertido y ameno, hasta donde lo hemos visto y lo podrán comparar con otras producciones, pero aquí lo original está en las interpretaciones. Omar Fierro y Arturo Peniche, con una complicidad natural, no necesitan mucho para hacer graciosos sus personajes. Los dos están muy bien. 

Lo que sí sería un acierto de la televisora es que se respeten los guiones, que no se extienda a pesar del éxito que pueda tener. Ya ven que cuando se engolosinan las cosas se salen de control. Nomás hay que recordar el gran éxito del productor Juan Osorio con ‘Mi marido tiene familia’, y cuando le pidieron que alargara, lo logró gracias a su gran experiencia (como todos los productores que sí conocen la televisión mexicana), pero de ahí se fueron como hilo de media y cuando uno va a tal velocidad y casi sin freno, pues la consecuencia es lo que pasó con ‘Juntos, el corazón nunca se equivoca’, un fracaso que no debió ser de inicio. 

PREGUNTAS DE LA SEMANA

Por curiosa, pero quienes trabajan en AztecaUno seguramente se preguntarán ¿cuándo terminarán los recortes en la televisora? 

Y ¿cuánto durará esto de los youtubers e influencers que exigen comidas gratis y denuncian injusticias que no existen?, ¿hasta dónde llegará la presión social que orilla a suicidios y asesinatos? 

Y siguiendo con esta realidad, ¿se volverá ‘normal’ ver la violencia en todos los medios de comunicación? Ahora vemos balaceras, muertos, masacres que, si bien a los adultos podrían no afectarnos tanto, a quienes están en plena formación, niños y adolescentes, sí. ¿Estará bien que se sigan señalando las diferencias en cadena nacional todas las mañanas? Esto se lo digo con toda paz. 

 

 

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