Neve Campbell tuvo que lidiar al principio de su carrera cinematográfica con un tipo de caída de cabello, la alopecia areata, que es la pérdida del cabello por zonas y que está relacionada con niveles elevados de estrés o alteraciones emocionales.
Lindsay Lohan. El estrés y los malos hábitos de vida han afectado su salud capilar, además de que ha maltratado mucho su cabello con tintes y el uso prolongado de extensiones.
Victoria Beckham. No ha podido lucir su cabello como quisiera debido a las dificultades de su cabello. Tiene un pelo muy frágil y fino que ha maltratado por constantes cambios de look. Las zonas laterales de su cabeza han quedado bastante despobladas.
Lady Gaga. Ella misma confesó tener problemas de alopecia; Ha modificado el color y la textura de su cabello en tantas ocasiones y de forma tan continuada que ha dañado sus folículos pilosos y el pelo ha comenzado a caérsele. Para disimularlo, acude a la mayoría de los eventos con pelucas o con la cabeza cubierta.
Naomi Campbell tiene un cabello débil y sin cuerpo, por lo que a menudo emplea pelucas y otros trucos para el pelo propios de las actrices y famosas para lucir espléndidas.
Britney Spears. Su imagen con la cabeza rapada dio la vuelta al mundo, y de acuerdo con los expertos, no fue que la princesa del pop haya tenido la ocurrencia de raparse, sino que padeció una caída del cabello producida por el mal uso de las extensiones y por el abuso de cosméticos capilares.
Soraya Arnelas. Tiene un pelo fino y la parte frontal de la cabeza poco poblada. Problemas que se hacen más evidentes cuando lleva el pelo un poco más largo de lo habitual o se lo tiñe de colores oscuros. La cantante se corta mucho el pelo para disimularlo, y recurre a tintes platinos.