¿Y si dejamos de consumir basura?

Lupita Martínez

OPINIÓN 04/07/2018 08:46 Lupita Martínez Actualizada 14:46

TODO PUEDE SEGUIR IGUAL... O NO. Nuestro país está empezando un cambio importante, es la primera vez desde el inicio de nuestra joven democracia que un candidato gana las elecciones con más del 50%, más de la mayoría han decidido que sea Andrés Manuel López Obrador quien nos gobierne los próximos 6 años. Al margen de nuestras preferencias políticas es momento de reconciliar y trabajar juntos para esos cambios positivos que queremos ver. Esto que escribo lo creo de verdad y se lo digo porque antes de las elecciones era preocupante y tema de conversación la cantidad de artistas y ‘artistas’ famosos postulándose para el Congreso como diputados o senadores, pues se podía suponer que habían sido elegidos como candidatos por sus respectivos partidos aprovechando su fama y por un mero beneficio económico más que por la intención de servir al pueblo.

Porque mire usted, no es malo que todos participemos de la vida política del país; lo que no es admisible es la falta de preparación y nula vocación de lo que le mencionaba: servicio. Ahí tiene usted, por ejemplo, a Sergio Mayer cuyo mayor talento todavía no se le conoce, que se postuló y ganó como diputado sin saber la diferencia entre ‘genocidio’ y ‘ecocidio’, y esa ignorancia podría haber sido nomás un tropiezo si antes no hubiera dicho que su intención al ganar las elecciones era la de solucionar los problemas del agua e inseguridad, ignorando que esa no es la labor de un diputado. Pero no conforme con su evidente ignorancia y aún habiendo contendido y ganado por un partido que promueve la igualdad, reconciliación e inclusión, el esposo de Issabela Camil se atreve a retar a quienes siendo candidatos cuestionaron su falta de conocimiento y preparación.

De los demás podría creer que Ernesto D’Alessio sí tiene esta intención y vocación, que su participación en la vida política es natural, de los demás lo dudo, pero como leía el otro día, había que buscar en dónde ajustar el gasto después del fin de la mayoría de las exclusividades.

Y el título de esta conversación es “todo puede seguir igual… O no” porque el cambio no sólo tiene que venir de quienes nos gobiernan, sino de nosotros como sociedad; entre nosotros es imperativo un cambio, mayor preparación, más lectura, más respeto. La televisión es el reflejo de la sociedad y quienes la producen ofrecen lo que saben que el público consume y no podemos seguir consumiendo chamanes, adivinos, brujos, videntes; no se trata de hacer limpias, se trata de actitud, de energía positiva que se contagie, de trabajo diario y no de supersticiones que es de lo que han llenado la televisión. La ignorancia es lo que ha hecho ganar por ejemplo al candidato que le mencioné antes. Amable público conocedor, las cosas cambian si cambiamos nosotros. 

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