El Mundial y Luis Miguel siguen siendo el tema de todos aunque sigamos en tiempo electoral hasta el próximo domingo y esto no es raro aunque sí lamentable y triste para otras ofertas como el regreso de ‘La academia’ que no ha conseguido el impacto esperado, aunque recordemos que eso puede eventualmente cambiar como ha sucedido en otras ocasiones y en una de esas hasta podrían considerar ofertarle a la productora Magda Rodríguez para que cambie de televisora, a ella eso se le da bien (lo de ‘La academia’ y lo de ir de un lugar a otro) e hiciera un éxito con este reality como ya lo ha hecho en otras ocasiones, porque hay que reconocer que en esos temas ella sí domina y es capaz de hacer triunfar hasta lo que uno no esperaba, “al César lo que es del César”. 

Por otro lado, la anunciada segunda parte de ‘La piloto’ también inició sin pena ni gloria, y es que aquí también hay que reconocerle a la producción la consistencia y continuidad, porque mire usted amable público conocedor, que si la primera parte fue mediocre, la segunda parte también lo es y en una de esas, como le decía la semana pasada en eso de superarse, esta serie también consigue hacerlo en su mediocridad. Por cierto, esta serie que en la primera parte no tuvo historia, en la segunda tuvieron el cuidado de no cometer el mismo error y para eso se “fusilaron” la anécdota de la desaparición de un niño en pleno vuelo como sucede en la película ‘Plan de vuelo’: ¿desaparecida? de Jodie Foster. ¡¡Son unos genios!! 

HISTORIAS DE LA VIDA REAL

Pero ya viene ‘Sangre de mi sangre’, producción de Santiago Galindo, para noviembre con una historia que tampoco suena muy original y es que a ver si a usted no le suena familiar: se trata de dos hermanos separados al nacer y uno se vuelve malo y otro bueno; uno será un capo famoso que patrocinará una carrera política, y el otro un agente del FBI (y no se refiere al FBI ‘Facebook Bronco Investigation’, sino al FBI de verdad), y que por cierto no es una agencia de investigación mexicana, pero eso no es raro porque ya sabemos que para Las Estrellas el público mexicano no es precisamente el más importante y se produce para otro mercado, aunque ahora no se usará el ‘spanglish’ porque al jefe le parece que no ayuda a las series y le voy a decir algo con toda paz: el ‘spanglish’ en ‘La doble vida de Estela Carrillo’ no afectó para mal en ningún momento y la serie fue un éxito incuestionable.