Una comisión de juguete

Gabriel Cruz

OPINIÓN 17/07/2018 07:10 Gabriel Cruz Actualizada 20:10

El Fantasma, luchador en activo, llegó hace más de 15 años a la presidencia de la comisión de la mano de Carlos Albert, en ese entonces Director del Instituto del Deporte del Distrito Federal (IDDF) durante el mandato de Cuauhtémoc Cárdenas. Así empezó una labor en la que el encauchado parece no rendirle informes a nadie.

Ha sobrevivido a seis jefes de Gobierno y a una cantidad similar de directores de IDDF, a pesar de varias faltas al Reglamento de la Comisión que preside.

 La más grave de ellas y principal es la referente a la Fracción V del Artículo 5° de dicha regulación.

Dicho artículo menciona que "para ser miembro de la Comisión se requiere: no tener nexo alguno con empresarios de lucha libre, promotores, representantes, luchadores profesionales, auxiliares o con cualquiera otra persona, relacionada directamente con la lucha libre profesional".

El Fantasma es padre del luchador El Hijo del Fantasma, quien por muchos años trabajó en el Consejo Mundial de Lucha Libre, con oficinas y arenas en la Ciudad de México. 

Actualmente lo hace con la empresa Triple A, también instalada en la capital del país y que presenta con cierta frecuencia funciones en este territorio. El próximo sábado lo hará en el gimnasio Juan de la Barrera.

Suele aparecer en eventos públicos acompañando a dirigentes de más rango o presumir "logros", como el de la afiliación de los luchadores al Seguro Popular, derecho al que puede acceder cualquier ciudadano.

El gremio necesita un cambio que signifique orden, de alguien cercano a la lucha libre, con conocimientos de ella, pero que no tenga intereses personales que se antepongan a los del deporte espectáculo que representa. 

La lucha libre debe dejar atrás el oscurantismo en el que se mueve, es un deporte espectáculo noble con personajes que valen mucho, pero también hay muchos que lo siguen dañando y que no merecen seguir viviendo de él.

Ojalá que la nueva encargada del gobierno en la Ciudad de México se interese más en el asunto y sepa delegar la responsabilidad en alguien con ideas nuevas y frescas.

¡Buenas luchas!

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