En mayo pasado, el administrador general de la Central de Abastos de la Ciudad de México fue separado de su cargo por orden de un juez de control a nivel federal al no acatar (art. 262, frac. 3 de la ley de Amparo) un ordenamiento de suspensión definitiva que mantenía la vigencia de contratos de operación de baños y estacionamiento a una empresa privada que se celebraron antes de que Palacios Trejo llegara al cargo. 

Mientras el proceso sigue su curso, el imputado Sergio “N” tiene que presentarse a firmar cada lunes en los juzgados del Reclusorio Norte, ya que también se ordenaron medidas cautelares en su contra. Dicen que se pone muy necio.

El nuevo gobierno de Claudia Sheimbaun en la capital del país tendrá que revisar la normatividad para ver si una persona, en este caso Palacios Trejo, quien se encuentra sujeto a proceso en calidad de imputado, también tiene facultades para ejercer el servicio público en un cargo de tanta responsabilidad como administrar esa pequeña ciudad que es la Central de Abastos. 

No faltará que Palacios Trejo alegue en su defensa política que el proceso ha estado “plagado de irregularidades”, lo que sea por defender un ‘jugoso hueso’, en tanto, persiste la poca transparencia en el destino de las carretadas de dinero que ingresan a la CEDA por conceptos de peajes, uso de baños y estacionamiento. A Palacios Trejo sólo lo investigan por sacar a una empresa y meter a otra. ¿Se imagina usted si la autoridad se dedicara a investigar el destino de dichos recursos económicos? Seguramente se llevaría varias sorpresas. 

Periscopio. El sábado pasado, cumplió años el ex líder nacional del PRI y actual diputado federal Enrique Ochoa Reza. Como quien toca los violines durante el hundimiento del Titanic, el prianista Javier Lozano Alarcón le extendió sus parabienes vía Twitter, en tanto que el senador saliente Jesús Casillas no desperdició el pase para el gol y se sumo a la tertulia tuitera: “También pensaba felicitarlo, pero luego me acuerdo de que fue el responsable de la derrota de @PRI_Nacional y me arrepentí”, trinó el jalisciense.

En el radar. El senador sin partido Emilio Álvarez Icaza quiso ‘colarse’ entre la lista de oradores durante la ceremonia de instalación de la LIIII Legislatura del Congreso de la Unión. ¿Su coartada? Asumirse como senador independiente. Porfirio Muñoz Ledo, presidente de la Cámara de Diputados, le recordó a Álvarez Icaza que compitió por la coalición “Por México al frente” y después se separó del grupo parlamentario.

Bitácora de lo absurdo. Que Gerardo Fernández Noroña haya perdido la cordura no es noticia, pero ahora es muy probable que haya perdido la razón. Le contaba en este espacio que el auto de lujo marca Volvo del diputado de Morena se encontraba en el taller porque los mecánicos no logran reparar la falla del auto ‘del nene’. Ahora, Noroña tuvo que subirse a otro Volvo, una unidad del Metrobús. El prepotente diputado federal le reclamó al chofer que no le hiciera la parada en una estación que se encontraba cerrada.