Luis Miguel, 'El Sol' en su atardecer

LEO AGUSTO

OPINIÓN 16/07/2018 07:38 LEO AGUSTO Actualizada 12:38

Más allá del fenómeno social que representa la figura del cantante mexicano, la teleserie biográfica, que terminó ayer su primera temporada, tiene mensajes políticos casi en código Morse. Todos calculados con precisión de relojero por el intérprete de “Cuando calienta el Sol”, sus amigos y sus socios. 

Primero la forma en que el padre descubrió los seis grados de separación con el ex presidente López Portillo para que el naciente Mickey cantara en la boda de su hija. La ruta fue: el actor Andrés García y el ex jefe de la Policía de la capital, Arturo “El Negro” Durazo. 

La aparición a cuadro de dos figuras emblemáticas de la industria de la televisión: los finados Emilio “El Tigre” Azcárraga y el presentador de televisión Raúl Velasco, que en su momento fue el gran filtro del éxito o fracaso de todas las figuras de la música en el mundo de habla hispana. 

Pero más allá de ese par de detalles que podrían pasar como anecdóticos, no hay que perder de vista que en México la serie se ha podido ver en televisión, bajo demanda, en Netflix, pero en Estados Unidos la serie se emite en el horario estelar del domingo en la cadena Telemundo. 

En México el mercado de la televisión abierta se ha reservado a tres grandes cadenas nacionales, la razón política es el control de lo que mira el pueblo en la pantalla. Pero también existe la razón comercial, donde las televisoras ya establecidas no quieren compartir el pastel del mercado de publicidad con nuevos competidores. Y tampoco el poder que da la televisión.

Ahí tenemos el caso del veto a Carmen Aristegui y a José Gutiérrez Vivó, que han encontrado en Internet un espacio de expresión como periodistas. Aristegui con una frecuencia diaria vía web y redes sociales. Los dos personajes podrían volver al primer plano informativo con la llegada de Andrés Manuel López Obrador al poder. 

Pero también a nivel empresarial ha habido bloqueos a la apertura. Desde el año 2000, Carlos Slim ha buscado participar en el negocio de la televisión abierta. Y del otro lado tenemos a la cadena Telemundo tocando las puertas de la industria en México con una serie de la vida del cantante más influyente de los últimos 30 años. 

Entre el mandato que recibió López Obrador en las urnas está la apertura del sector, la competencia justa también significa eliminar algunos privilegios como la repartición discrecional de las concesiones. No se sorprenda si en algunos meses nos toca ver pujando tanto al Grupo Carso, con la cadena Telemundo, por una nueva cadena de TV. Ahí está el as de Luis Miguel. 

Periscopio. El canal de TV de Multimedios en la Ciudad de México ya comenzó a emitir su señal de prueba en el 6 del HD. En el 6.2 se ha visto la programación habitual de Milenio.

En el radar. Hablando de televisión pública, una de las consecuencias de la apertura del mercado de la TV en HD será el avance en la democratización de los espacios en los canales culturales, educativos, culturales del Estado.

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