En estos tiempos de Pegasus, debería ser ocasión pedir un aplauso para el amor, porque si todo sucede como está previsto, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) hoy dará por concluidos los trabajos de restauración y mantenimiento de ‘El Caballito’, obra monumental ecuestre de Manuel Tolsá dañada irresponsablemente por el Fideicomiso del Centro Histórico en septiembre de 2013. Muy contento estaría Guillermo Tovar y de Teresa, quien lamentablemente falleció en noviembre de ese mismo año, en un momento donde la campaña que encabezaba vía Facebook en defensa de ‘El Caballito’ tenía un auge importante y peso en los círculos políticos y culturales de la capital del país. 

Dieciocho meses de trabajo y casi 8 millones de pesos costó al INAH y a los mexicanos el ‘performance’ de Inti Muñoz, quien como titular del Fideicomiso del Centro Histórico encargó a su amigo y experto en limpieza de bancas públicas de metal, Javier Marina Othón, los “trabajos” de restauración de ‘El Caballito’ por 240 mil pesos, según consta en la información pública disponible. Dada la inexperiencia del ‘chambitas’ Javier Marina, poco profesionalismo y nula ética; dañó al huésped de la plaza Tolsá de manera casi irremediable, al quitarle el 45% de la pátina. Entonces, las fotografías del rostro descolorido de la escultura se convirtió en denuncia y tendencia en las redes sociales. Inti Muñoz se quedó sin chamba y nosotros sin más ‘Caballito’ que el amarillo de Sebastián, en Juárez y Bucareli. 

La Contraloría Interna del gobierno capitalino fue muy generosa al inhabilitar en 2015 al ex porro de la UNAM, quien pagó barato por su barbaridad con la inhabilitación del servicio público en octubre de 2015 por tres meses; en la Unesco, hasta lo premiaron. Ahora don Inti Muñoz le hace al ‘especialista en cultura’ en la oficina en México de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura. ¿Experto en qué, Unesco, en dañar el patrimonio de la humanidad y en gentrificar el Centro Histórico con cervecerías? Muchos lectores seguramente se harán preguntas como las anteriores o tantas otras. Y es que (muletilla adorada), si comparamos el “proyecto” original con la cantidad de instancias del INAH que intervinieron en la restauración, casi se podría afirmar que los conocimientos que tenía Inti Muñoz de ‘El Caballito’ los habría visto en la serie setentera de TV, Cantinflas Show. 

Por lo pronto, no se sorprenda si de pronto sus redes sociales se ven inundadas con ‘selfies’ en el histórico ‘Caballito’ de Manuel Tolsá en honor al rey Carlos IV de España, en 1803. Esperemos nos dure la obra y a salvo de manos de personajes como el tal Inti Muñoz.

Periscopio. La comisión de grupos vulnerables de la ALDF aprobó por unanimidad reformas al Código Penal y a las leyes de derechos de las personas adultas mayores y de integración al desarrollo de las personas con discapacidad de la Ciudad de México para castigar hasta con 3 años de cárcel a los familiares, (hijos, nietos) que abandonen a su suerte a adultos mayores (padres, madres, abuelitos) o a personas con discapacidad e impidan su participación efectiva en la sociedad. La iniciativa fue impulsada por la perredista Elizabeth Mateos y pasará al pleno para su discusión y votación. ¿Te lo digo Juan o me entiendes Pedro...? 

Bitácora de lo absurdo. Javier Duarte de Ochoa ya no quiere queso guatemalteco, sino salir de la ratonera y en la tercera audiencia pidió a la Corte de nuestro vecino del sur, el allanamiento de su proceso de extradición para regresar a nuestro país y ser juzgado por los no pocos delitos que se le imputan, todos cometidos durante su gestión como gobernador. Si la caída de ‘Javidú’ le dio oxígeno al PRI durante el pasado proceso electoral, ahora podría bajar un poco la presión puesta sobre el gobierno del panista Miguel Ángel Yunes, que no ha podido controlar a los grupos criminales en Veracruz y, a juzgar por su discurso mediático, está a un calificativo de perder la cabeza, porque el control de la entidad lo perdió hace mucho. Si es que alguna vez lo tuvo. 

Twitter: @LeoAgusto