¿Nos impactarán los aeropuertos?

OPINIÓN 26/08/2015 05:00 Actualizada 05:00

Ahora en la Ciudad de México se discutirá qué hacer con los terrenos e inmuebles que en la actualidad albergan al actual aeropuerto y que dejará de prestar servicios para 2020. Se trata de un espacio nada despreciable: el 1% del suelo urbano, un espacio dos veces más grande que el famoso Central Park de Nueva York, mayor que Chapultepec, y únicamente 20% menor que el parque nacional del Ajusco.

En septiembre, las autoridades del GDF impulsarán un foro en el que expertos de otros países compartirán experiencias similares: qué hizo, por ejemplo, la autoridad de Tokio, Japón, cuando el aeropuerto dejó de funcionar y cómo utilizó el terreno recuperado.

Actualmente, se habla de crear un parque, bosque urbano, de que la gente pueda acceder a áreas verdes, un espacio en el que haya la oportunidad de que la lluvia pueda recargar de nuevo los mantos freáticos y así prevenir un poco del hundimiento y la escasez de agua que sufre el oriente de la Ciudad.

Sin embargo -y a pesar de las convenciones administrativas que dividen al Distrito Federal del Estado de México- la ciudad en la que vivimos no se termina en el DF. Nuestra megalópolis incluye municipios mexiquenses colindantes: Ecatepec, Neza, Chimalhuacán y Texcoco, entre otros. La transformación del terreno que actualmente ocupa el aeropuerto, ¿cómo podrá revertir los impactos que tendrá la construcción del nuevo aeropuerto?

En Texcoco, a la construcción del nuevo aeropuerto probablemente impacte, entre otras cosas, la vocación semi rural de la región. Y a ello se suman los proyectos que lo circundan: Ciudad Futura, la ampliación de vías de transporte, y todo ello está siendo licitado a empresarios e iniciativa privada. Las decisiones, sin embargo, afectarán a los vecinos y pobladores de la región.

¿Cómo será la vida de estas colonias con el nuevo aeropuerto en Texcoco?, ¿cómo cambiará?, ¿cómo se diseñará el parque en el lugar del actual aeropuerto?, ¿qué empresas se verán beneficiadas? Sólo mediante la información y la organización de vecinos y ciudadanos, se podrán impulsar los proyectos que realmente beneficien a la población.

 

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