EN CADA FUMADA, entran por lo menos 250 sustancias tóxicas que causan daño en todo el cuerpo. Es tan nocivo, que la mitad de los fumadores morirán por causas asociadas al tabaco, como el cáncer. El más conocido es el de pulmón, pero también tiene un papel en los de boca, garganta, cérvico uterino, mama, estómago o colon. Es también un factor desencadenante en los ataques cardiacos, derrames cerebrales o enfisema del pulmón. Además, fumar empeora la diabetes, la hipertensión arterial, la obesidad, úlceras gástricas, problemas de circulación y la osteoporosis. Por si fuera poco, acelera el envejecimiento y ocasiona trastornos sexuales como la incapacidad de tener erecciones. Atrás de cada hombre o mujer con un cigarro hay un fantasma con alguno de estos males que lo acercan a una muerte temprana y dolorosa.

Se estima que cada 10 minutos muere un mexicano/a por causas asociadas al tabaco; sin embargo, no es necesario ser un fumador directo, una de cada 6 de estas defunciones ocurre en personas que respiraban el humo de otros/as (humo ajeno).

El tabaco no es sólo una amenaza a la salud de las personas, por la gran cantidad de muertes y el daño que causa, afecta también la economía y el desarrollo de los países. Es por ello que la Organización Mundial de la Salud celebra cada 31 de mayo el Día Mundial sin Tabaco, que en 2015 hace un llamado a los países para que pongan un alto al comercio ilegal de productos.

A pesar de cada vez estar más informados sobre los daños del cigarro, la aceptación social del tabaquismo en México sigue siendo muy alta, muchos aceptan con naturalidad que se fume en espacios prohibidos o que se vendan de manera ilegal cigarros sueltos en puestos ambulantes, lo que anula las medidas para evitar su consumo sobre todo en adolescentes. Las cifras en nuestro país muestran que mientras los adultos tienden a fumar menos, los jóvenes han incrementado su consumo, de tal forma que el porcentaje de fumadores va en aumento y la edad de inicio se ha reducido.

Los y las adolescentes fuman porque pueden; conseguirse o comprarse cigarros es muy fácil, se sienten presionados por su amigos y compañeros para fumar en un ambiente donde el uso del tabaco es muy extendido y también por la actitud de una sociedad tolerante donde padres, hermanos y amigos piensan que fumar es aceptable.

Si fumas y has pensado en dejarlo, no lo dudes o lo dejes para después, mientras más pronto es mejor.

Abandonar el cigarro tiene mejorías inmediatas y otras a largo plazo, tu familia te verá con más respeto, tendrás menos resfriados y alergias, te cansarás menos porque tu cuerpo recibirá más oxígeno, no malgastarás tu dinero y disminuirás considerablemente el riesgo de padecer cáncer, enfermedades del corazón o hemorragias en el cerebro; si esas no te interesan, tal vez te anime pensar que tendrás una vida sexual más larga y placentera.

Se puede dejar el cigarro si te lo propones y buscas ayuda.

Todas las instituciones de salud tienen programas para dejar de fumar. Llama al 01 800 911 2000 para información sobre como dejar el tabaco o para denunciar el incumplimiento a la Ley.

Cuida tu salud.

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