¿Adultos pequeños o niños grandes?

OPINIÓN 25/06/2013 05:00 Actualizada 05:00

Existen razones entendibles para que los hijos adultos permanezcan en casa de sus padres: la falta de empleo, el cuidado de los padres enfermos y la acumulación de deudas. Sin embargo, hay hijos adultos que nunca se van de casa. Se les ha llamado hijos con complejo de Peter Pan por su renuencia a "crecer" y madurar. También se les ha llamado "hijitos de mami", o "niños grandes".

Son hijos, hombres y mujeres, mayores de 30 años que se comportan como adolescentes permanentes dado que no asumen responsabilidades de adultos. Es común que sus vidas no tengan una dirección clara y que no estén dispuestos a cambiar las comodidades que encuentran en su familia de origen. Vivir con los padres es prolongar la adolescencia, lo que les impide alcanzar una madurez psicológica y social. Se trata de un estancamiento en el crecimiento personal. A pesar de su madurez física, estos hijos se infantilizan, lo que en algunos casos se refleja en su forma de vestir y conducirse.

¿Por qué permanecer en el nido familiar?

Tienen una aversión a tomar riesgos. Esta se deriva de la actitud sobreprotectora de los padres. Cuando los progenitores les dan todo a los hijos, éstos se rehúsan a abandonar esa comodidad. Estos padres no los dotan de herramientas para enfrentar la vida independiente, no promueven la autonomía. En lugar de enseñarles a pescar, sólo les dan pescado.

Tienen diversos temores. Les da miedo la separación porque no creen poder salir adelante mediante sus propios recursos: habilidades, capacidades y conocimiento. Su autoestima, la convicción de poder y merecer, está disminuida. Sienten que merecen; de hecho, son egocéntricos que se creen merecedores de recibir y pedir. Pero no creen que pueden tener logros y abrirse camino en la vida. Temen fracasar, por lo que postergan la salida del seno materno indefinidamente. Huyen del compromiso como de la plaga, pues nunca se sienten lo suficientemente preparados para enfrentar una responsabilidad.

¿Cómo contribuyen los padres?

Algunos padres se quejan de tener hijos que nunca se van de la casa. Otros no, por el contrario, promueven esta conducta en sus hijos. ¿De qué manera? Justifican que se queden estancados en casa: "Mi hijo no tiene necesidad de pasar apuros". Sienten temor o culpa de no haber hecho un buen trabajo en la crianza de sus hijos. Por lo tanto, no confían en que estén preparados para enfrentar el mundo real. Quizás estos padres les exigieron logros académicos a sus hijos, pero nunca enfatizaron la importancia de desarrollar la autonomía.

En ocasiones se crea una dependencia mutua, en la que los padres no se atreven a estar solos. En este tipo de relación, es comprensible que los hijos tampoco desarrollen la fuerza necesaria para salir adelante por sus propios medios. Esto sucede, sobre todo, si uno de los progenitores, aun estando sano, no tiene pareja. Estas son algunas de las posibles razones por las que los padres de hijos con complejo de Peter Pan no hacen nada para ayudarlos a que dejen el nido. O hacen todo para que no lo abandonen.

Un gran apoyo para que los hijos maduren psicológicamente consiste en promover la autonomía. Esto involucra estimular el uso de sus propios recursos; confiar en que podrán valerse por sí mismos, utilizando todo lo que se les ha inculcado a lo largo de su crianza; y evitar sobreprotegerlos.

CITA:
"No les eviten a sus hijos las dificultades de la vida, enséñenles más bien a superarlas" LOUIS PASTEUR

DATO INTERESANTE:
"Una encuesta reciente realizada en Córdoba, España, y distintas localidades del interior, reveló que en esta provincia mediterránea hay 450 mil solteros (mayores de 30 años) que viven en casa de sus padres y no logran "cortar el cordón"
(www.diaadia.com.ar)
¿Cuántos habrá en México?

RECOMENDACIÓN:
Soltero en Casa
Director: Tom Dey
Sinopsis: Un atractivo soltero de 35 años aún vive con sus padres. Hartos de esta situación, los padres contratan a una profesional para que lo convenza de independizarse y abandonar la casa.

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