Lo detuvieron en Viveros. Pero la víctima (de quien se omite el nombre) lo había visto en muchas ocasiones ahí y en el parque Xicoténcatl. 

De hecho, en este último lugar lo vio por primera vez, en septiembre de 2014, cuando el tipo la asaltó.

Casi nadie denuncia un robo con violencia a celular (mucho menos, se denuncia el exhibicionismo); pero ella sí lo hizo. Y se le quedó grabada la fisionomía del perpetrador: un tipo al que había visto, alto, fornido, y que pretendía hacer como que estiraba para comenzar a correr. Pero, en realidad, el tipo nunca corre. Sólo está cazando probables víctimas.

En aquel 2014, la víctima narró lo ocurrido a vecinos asiduos al parque. Se enteró de que otras habían sufrido lo mismo. Ella decidió dejar de ir a Xicoténcatl, asistió mejor a Viveros. Pero ahí también lo vio varias veces, no sólo buscando posibles víctimas de asalto. El tipo también se sacaba el miembro, lo mostraba a mujeres, madres de niños pequeños, adolescentes, estudiantes, mujeres mayores.

Ella sólo lo evitaba, pero la última vez decidió que era suficiente. Pidió ayuda a la policía y lo hizo detener. Fueron varias mujeres a interponer una denuncia por exhibicionismo. Pero en el ministerio público de Coyoacán, les dijeron que masturbarse en un lugar público “no es delito”. Otras abogadas, por el contrario, dicen que claro que sí hay delito: acoso, abuso sexual, exhibicionismo.

Se suman las historias. Hace unos meses, en esta columna, se narró el caso de una mujer con dos niños pequeños que fue agredida por una persona muy similar en el parque Xicoténcatl.

Y, de hecho, algo similar al asalto de 2014 me ocurrió en abril de 2012, en Viveros. En su momento lo narré también en este espacio. Corría en Viveros, un tipo, alto, fornido, al que no alcancé a ver más que los brazos, me tomó por el cuello, se llevó mi celular. Grité, la policía tardó en llegar. Nunca lo alcanzaron.

2012. 2014, 2016, 2017. Y esto ocurre en parques de zonas privilegiadas, clasemedieras de Coyoacán. Zonas fresas. Se suma la reciente agresión a una corredora en el Bosque de Tlalpan (en la cual, según las autoridades, ya detuvieron al agresor). Si esta indefensión ocurre en los lugares privilegiados, ¿Qué ocurre en los parques de asfalto de las colonias populares? ¿Cuántas cámaras hay? ¿Qué tipo de vigilancia? ¿Cómo se asegura el gobierno de la Ciudad que los espacios públicos sean seguros? ¿De verdad una mujer no puede ir a un parque, a correr, con sus hijos o perro, sin temer ser asaltada, abusada o violada?

GLOSARIO DE SUPERVIVENCIA Impunidad: Predicción de repetición.