El cacique zacatecano supera ya en cinismo al potosino Gonzalo N. Santos, que en su tiempo acuñó una de las frases que mejor definen al tricolor; “la moral es un árbol que da moras”. En ese mismo tono, el jefe delegacional en Cuauhtémoc, Ricardo Monreal, acusa una campaña de desprestigio en su contra luego de que su mano derecha, Pedro Pablo de Antuñano, fuera detenido por la policía capitalina en posesión de $600 mil pesos en efectivo sin poder demostrar, hasta la fecha, el origen de dichos recursos económicos.

Pedro Pablo de Antuñano, ex director Jurídico y de Gobierno en la delegación Cuauhtémoc, podría ser vinculado a proceso por la PGJ de comprobarse que dicho dinero es producto de la corrupción evidente y cotidiana en una de las demarcaciones más importantes de la Ciudad de México. El llamado “monrealismo mágico” (Raúl Flores dixit) buscó minimizar el daño político provocado por esta presunta conducta ilegal de quien hasta hace unos días fuera considerado como el sucesor “natural” de Ricardo Monreal en la jefatura delegacional. Pero la Contraloría capitalina determinó ya la separación del billetudo funcionario hasta que se aclare la situación.

Sin embargo, ningún integrante de Morena ha salido en defensa del zacatecano. Nadie, ni Andrés López Obrador. Por lo que resulta muy sospechosa la defensa que lanzó en Twitter el gobernador de Chiapas, Manuel Velasco, no sólo porque pertenece a la llamada “mafia del poder” señalada por López Obrador en sus arengas en la plaza pública. ¿Por qué es sospechosa la defensa del chiapaneco? Porque fue justamente en el aeropuerto de Tuxtla Gutiérrez, donde fue detenida en julio de 2015, Benelly Jocabeth Hernández, con un millón de pesos en efectivo y quien es colaboradora de Monreal en el área de Desarrollo Social en la Cuauhtémoc. Falta ver que la Contraloría del GDF proceda contra la funcionaria de la misma manera y la separe del cargo hasta que la PGR deslinde responsabilidades.

Con ambos casos, queda al descubierto el modus operandi de Monreal para financiar la operación política de su grupo, pero también del líder nacional de Morena, quien se ufana de honesto al tiempo que se rodea de políticos corruptos. Hace tiempo, el operador financiero era René Bejarano hasta que fue conocida su afición por las ligas y su turbia relación con Carlos Ahumada. Ahora Monreal utiliza a sus achichincles como burros para transportar pacas de dinero en efectivo.

De manera presurosa, el PRD llamó al delegado en Cuauhtémoc a comparecer ante la ALDF donde seguramente le veremos perder por primera vez en su carrera el debate en tribuna cuando la aplanadora amarilla, azul y tricolor le pase por encima.

Resulta grotesco ver a personajes como Mauricio Toledo condenar la corrupción en Morena, cuando es precisamente este personaje uno de los menos indicados para hablar de honestidad en este país, señal de que en las próximas semana veremos que la guerra fratricida en la izquierda se recrudecerá a tal grado que podría menguar aún más la imagen y aceptación en las encuestas del PRD y también mostrar el verdadero rostro de Morena, partido que aún se vende como el más honesto ante los ciudadanos, idea que algunos compran con ingenuidad.

Periscopio. Este jueves se celebra el Día Internacional sin Auto y un grupo de senadores, convocados por Jesús Casillas, participarán en una rodada en bicicleta desde el Auditorio Nacional hasta el recinto parlamentario de Insurgentes y Reforma con el fin de promover el uso de este medio de transporte. Se espera que asista el coordinador parlamentario del PRI, Emilio Gamboa; la senadora Hilda Flores Escalera y otros legisladores entusiastas de la bicicleta de otros colores como Mariana Gómez del Campo y el perredista Zoé Robledo.

Bitácora de lo absurdo. Otro que no entiende que no entiende es el actor Bruno Bichir, que en su papel de diputado Constituyente de Morena sigue pujando por que el gobierno de la ciudad le done parte del parque Cholula para continuar con su legítimo proyecto de vida: el teatro; sin importarle que su gestión lo coloque en claro conflicto de interés. De la inexistente declaración 3de3 del diputado Bichir mejor no hablamos ahora porque no la ha presentado.

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