Este fin de semana Lucha Élite realizará un torneo de corte internacional en la arena México, función que podría opacar un poco al Grand Prix que hará el CMLL.

 

El año pasado, el Mundial de Lucha Libre, que se repitió hace unas semanas reactivó la oferta de lucha libre internacional de calidad en los cuadriláteros mexicanos, mezclando talento de varias partes del orbe. En respuesta, el Consejo Mundial de Lucha Libre ha revivido el concepto del Grand Prix que tenía olvidado desde el 2008, se realizará este primero de julio con buenos elementos pero con la sensación de que dada la importancia de la competencia merecía un esfuerzo más para redondearla.

 

Por si faltara una oferta más. Lucha Élite le entró a la batalla con su propio torneo, en el que aparecerán jóvenes talentos como Lio Rush, además de la leyenda extrema Sabu, lo que promete una buena combinación sobre el enlonado.

 

Las tres son buenas opciones para la fanaticada local. En el caso del Mundial, no tuvo el mismo impacto que su primera edición pero se trata de un proyecto serio que debe mantenerse en el futuro.

 

Para Lucha Élite será una buena prueba de los alcances que ha conseguido en su segunda etapa como promotora. Es una realidad que los cambios de día de sus funciones ha perjudicado en la asistencia a las mismas, esta vez la cartelera luce atractiva y se presentará en dos días, jueves 23 y sábado 25 de junio, complicado que sea un éxito en taquilla.

 

Élite se ha desarrollado como un producto para la televisión y eso suele maquillar la ausencia de gente en las gradas cuando se realizan sus funciones. Es necesario que encuentren el equilibrio para que el proyecto sea triunfador en todos sentidos.

 

En cuanto al Grand Prix, el respaldo histórico que tiene lo convierte en una garantía de un buen espectáculo, aunque en esta ocasión no convence del todo la presencia de estetas como Okumura y Marco Corleone, elementos bastante vistos en la arena México y que no representan un novedad para los aficionados.

 

Pese a todo. La estrategia de apelar al nacionalismo con el enfrentamiento de México contra representantes de varias partes del mundo le otorga un interés especial.